Una sorpresiva decisión de la Aministración Federal de Ingresos Públicos (AFIP) trajo problemas esta semana para las personas que se acostumbraron a comprar productos en webs del exterior y recibir los productos en su hogar a través del Correo Argentino.

Las compras "puerta a puerta", que hace un año se habían vuelto ilimitadas, de repente comenzaron a tener un tope anual. Las quejas no tardaron en estallar y, en menos de 24 horas, la medida quedó oficialmente desactivada.

Los primeros indicios de que algo había cambiado fueron los mensajes de error que recibieron algunos compradores cuando intentaron hacer la habitual declaración jurada online para destrabar el reparto a domicilio de los productos que habían comprado y que ya llegaron al país.

"Atento a superar la cantidad de envíos consignados a esta CUIT, se presume que su compra tiene una finalidad comercial", decían esas leyendas, para luego informarles que, para tramitar el retiro de las mercaderías, debían inscribirse como importadores en el Régimen Especial Aduanero, en un procedimiento mucho más largo y complejo.

Esto extrañó a los contribuyentes porque, con el nuevo régimen, vigente desde el 26 de agosto de 2016, sólo los envíos por correos privados -los llamados courier- tenían un límite pautado (en ese caso, de cinco operaciones por año). Para las operaciones a través del Correo Argentino, en cambio, el propio micrositio de la AFIP dedicado al "puerta a puerta" consignaba: "No tiene límites en cantidad de envíos".

Pero la intención restrictiva del organismo recaudador quedó confirmada en las primeras horas del miércoles, cuando modificó esa web para indicar, por fin, que el Puerta a Puerta ahora tenía "un límite de 12 envíos por año calendario por persona" usando el correo oficial.

Las protestas comenzaron a estallar en las redes sociales, en especial por parte de personas que habían hecho más de una docena de compras este año y que tenían otras en camino, ya pagadas.

Pero todo volvió a cambiar. Ante un escándalo que se insinuaba creciente, y a sólo cuatro días de las elecciones, la AFIP resolvió dar marcha atrás completamente con la medida. Y la web oficial volvió a indicar, como antes, que se puede recibir una cantidad ilimitada de paquetes, siempre que el envío no valga más 200 dólares y ni pese más de 2 kilos.

"La modificación que se había implementado el martes quedó desactivada y los compradores ya pueden cargar sus declaraciones juradas como antes", confirmaron fuentes de la AFIP, aunque advirtieron que "en algún momento puede volver" porque desde el área destinada a los controles observan que el régimen actual puede dar lugar a "abusos". 

Eso fue, explican, lo que motivó la fugaz imposición del tope de 12 envíos anuales, ahora desactivado hasta nuevo aviso. "Una cosa es que el contribuyente haga 10 compras distintas y otra, que haga 150. Llega un punto en el que podemos suponer que están trayendo al país los productos para comercializarlos, y en ese caso debe aplicarse otro régimen", ejemplificaron.

"Lo que se resolvió -señalaron a Clarín- fue suspender la medida y tomarnos un tiempo más para estudiar la cuestión en profundidad, revisando los casos de las personas que estén comprando demasiados productos. Pero debe quedar claro que hay una firme decisión de no permitir que se cometan abusos. En el mediano plazo, la idea es encontrar un equilibrio entre la facilitación de las compras y el debido control".

Por traer un producto con el régimen "puerta a puerta" del correo oficial, la Aduana cobra un arancel del 50% del valor total de la compra. A eso hay que sumarle, luego, lo que cobra el Correo Argentino por las gestiones y el reparto. Ese monto estuvo bonificado al inicio, luego fue de $100 y ahora está en 120 pesos.