La tecnología de cifrado de extremo a extremo WhatsApp implantada en 2016 permite que todas aquellas comunicaciones establecidas a través de su plataforma solo puedan ser descifradas por el emisor y el receptor.

Esto implica que terceras partes no pueden acceder y entender la información enviada, sea esta una imagen, texto o nota de voz. Incluso WhatsApp notifica que las llamadas o videollamadas están protegidas del acceso de cualquier otro interesado. Todo esto, pero, solo funciona mientras la comunicación no salga de WhatsApp.

Cuando se realiza una copia de seguridad, toda esa información antes cifrada queda copiada en Google Drive sin ninguna capa adicional de seguridad más allá de la que ofrezca Google en sus servidores.

Google no cifra esa copia de las conversaciones. La seguridad entonces queda reducida a la protección estándar de las cuentas de usuario de Google pero sin claves de cifrado que solo la hagan comprensible a emisor y receptor.

Mientras esas conversaciones están en WhatsApp, ni aunque los responsables de los servidores de la empresa propiedad de Facebook quisieran facilitar su acceso, nadie podría llegar a descifrarlas sin la clave de seguridad correspondiente de la que solo disponen los interlocutores. En Google, en cambio, se depende de la política de cesión de datos privados de la empresa de Alphabet.

En caso de que una agencia de un gobierno obligase a la empresa a dar los datos de un usuario, Google podría acabar abriendo las puertas a las copias de seguridad que se almacenan en su servicio en la nube.

En el caso más reciente, India presionó a WhatsApp para que revele el origen de determinados mensajes. Con la solución criptográfica actual de WhatsApp, esto es imposible, pero si Google cediese a una presión similar en sus servidores, el resultado sería muy diferente.

Las copias de seguridad de las conversaciones de WhatsApp son una funcionalidad opcional. Solo si se activa esta opción, las conversaciones se copian a los servidores de Google para poder trasladarlas luego a dispositivos nuevos. Además, este problema solo afecta a los usuarios de WhatsApp para Android.

Los usuarios de Apple, cuyas copias de seguridad se realizan en el servicio de iCloud, cuentan con el cifrado por defecto de esta cuenta. En este caso, incluso el FBI ha recibido la negativa de Apple para acceder a datos protegidos en los servidores de Apple.

Como apunta WhatsApp en su propia página web, en el espacio de preguntas habituales (F.A.Q.), “Importante: Los archivos multimedia y mensajes que guardes no estarán protegidos por el cifrado de extremo a extremo de WhatsApp mientras están en Google Drive.”

La semana pasada, WhatsApp anunció un acuerdo con Google que ha establecido que el espacio ocupado por estas copias de seguridad de las conversaciones del servicio de chats no cuenten dentro de los 15 GB que Google Drive ofrece de forma gratuita a todos sus usuarios.