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Vinos & Bodegas presenta el Top 40 que permite conocer cuáles son las bodegas y las líneas de vinos más consumidas en el exterior 
04/06/2015 - 20:49hs

Luego de un 2014 muy complejo, marcado a fuego por la pérdida de competitividad y la caída de la demanda externa, las exportaciones de la industria vitivinícola están mostrando algunos tibios síntomas de recuperación. 

A contramano de la dinámica que exhiben las ventas al mundo en general –que según el INDEC acumulan un desplome del 17%-, las exportaciones de vino concluyeron el primer cuatrimestre con un alza del 9% respecto al mismo período del año anterior. 

Paralelamente, según se desprende de un relevamiento realizado por el Observatorio Vitivinícola, los envíos al exterior realizados por bodegas argentinas entre enero y abril generaron ingresos de divisas por casi u$s267 millones, lo que implicó un ascenso más tibio, del orden del 1 por ciento. 

Según el informe, “el crecimiento exportador del vino estuvo comandado por los genéricos, que mostraron crecimientos de más del 19% en volumen y de más del 14% en valor, mientras que los varietales, aunque también crecieron, lo hicieron con tasas menores, tanto en litros (+7%) como en dólares (+0,26%)”. 

Un dato clave, según las estadísticas, es la fuerte concentración de las ventas al mundo en el varietal estrella de la Argentina: el Malbec. 

Mientras que años anteriores los vinos elaborados en base a esta cepa representaban cerca del 50% de las exportaciones totales, en la actualidad, el Malbec ostenta un market share superior al 60%, con un alza del 6% en términos de volumen. 

Lo que sorprende es el auge que está logrando el Cabernet Sauvignon. Según el Observatorio Vitivinícola, desde el país se despacharon cerca de 14 millones de litros, lo que implicó un salto del 44% respecto al primer cuatrimestre de 2014. 

Top 40: las marcas más exitosas

Este presente alentador que están viviendo las bodegas nacionales está traccionado, lógicamente, por las principales marcas de vino, que son las responsables de mover el amperímetro en cuanto a la generación de divisas. 

Según un relevamiento al que accedió iProfesional, en base a datos de Aduana, la marca Alamos continúa ubicándose en el primer puesto. 

Según registros elaborados a partir de cifras oficiales, en el primer trimestre del año, esta línea fue responsable de generar exportaciones por un valor cercano a los u$s10 millones, lo que implicó un crecimiento de casi 4% respecto a igual período de 2014. 

El top 3, en tanto, se completa con las líneas Trapiche y Norton, con envíos al mundo por u$s4,2 y u$s4,1 millones, respectivamente (ver cuadro). 

Un dato que vale la pena destacar es que la cuarta marca de vino argentino más exportada es Kirkland, que no pertenece a una bodega local, sino que es propiedad de la empresa Costco, una importadora que opera en Estados Unidos y Canadá y que comercializa desde alimentos hasta muebles, pasando por electrodomésticos

Así las cosas, Kirkland es una marca propia que se aplica a un gran universo de artículos, entre ellos, a los vinos. Se trata de ejemplares económicos que en la web reciben críticas dispares.

Un aspecto clave es que esta marca hasta el 2013 se ubicaba recién en el puesto número 15, de modo que en apenas dos años logró un importante avance. Esto, sin dudas, enciende una luz de alerta para las bodegas nacionales, cada vez más enfocadas en comunicar las particularidades de los diferentes terroirs de la Argentina. 

En el quinto puesto, en tanto, se ubicó la línea Trapiche Reserva, con envíos por unos u$s3,9 millones entre enero y marzo, con una fuerte caída del 12%, lo que implicó que retrocediera un puesto en el ranking general. 

Otra marca responsable de manejar grandes volúmenes pero que no pudo escapar de la tendencia negativa fue Fuzion, de Familia Zuccardi, cuyas exportaciones –según datos del sistema aduanero-, experimentaron una fuerte caída del 18%, una contracción que la desplazó del top 10 y la relegó al puesto número 11. 

En tanto, la línea Norton Colección tampoco está atravesando un año positivo: en divisas, las exportaciones de vino realizadas bajo esta marca descendieron un 11% en el primer trimestre, retrocediendo así tres puestos en el ranking general, dejándola afuera de las 10 líderes. 

En sentido contrario, hay un grupo de bodegas que, desde un escalón más abajo, vienen traccionando con fuerza en el ranking, de la mano de importantes tasas de crecimiento. 

Tal es el caso de Séptima, la línea de vinos de la bodega homónima, perteneciente al Grupo Codorníu, cuyas exportaciones vienen trepando a un ritmo del 21%, por encima del promedio. 

Otro caso digno de mención es el de Crios, perteneciente a Dominio del Plata, bodega comandada por la enóloga Susana Balbo, recientemente nombrada como “Woman of the year” por la publicación británica The Drinks Business. 

Esta marca pasó de generar ventas al mundo por medio millón de dólares entre enero y marzo de 2014 a más de u$s1 millón en igual lapso de este año. 

Pese a que las exportaciones en general vienen repuntando, Balbo, quien también se desempeña como presidenta de Wines of Argentina, en reciente diálogo con Vinos & Bodegas afirmó que “la competitividad cambiaria sigue siendo un tema muy serio. Para las bodegas es un hecho que el dólar quedó muy retrasado, en un contexto de alta inflación como el que padecemos. Un indicador que sirve para ilustrar esto es que hoy la Agentina no puede exportar en los segmentos bajos de precios. Ya no somos rentables por debajo de los u$s30 FOB por caja. Y el precio promedio que hoy manejamos es de u$s33, es decir que estamos apenitas por encima de la línea de flotación. Esto es crítico, porque hace unos años éramos rentables a u$s18”. 

La directiva agregó que “hay bodegas que están exportando a 20 a 24 dólares, lo cual es inviable en términos financieros. Lo que hacen es subsidiar las gamas bajas por las más altas o directamente con el mercado interno. Esta estrategia tiene como objetivo no resignar share o no perder mercados”. 

Otro indicador que sirve para entender el panorama actual es que, según Balbo, “Chile hoy tiene en el mercado brasileño 42 puntos de share y nosotros 21”. 

“Es una diferencia de exactamente el doble, cuando hace unos años la brecha era mínima. Esto es producto de la pérdida de competitividad que tenemos por el tipo de cambio y las dificultades por las relaciones bilaterales”, completó. 

© Por Juan Diego Wasilevsky - Editor Vinos & Bodegas iProfesional - [email protected]

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