Pablo Granados es un artista muy completo, que se destaca como músico, cantante, actor, productor y, fundamentalmente, como una persona que presta atención a la realidad para crear.

En una nota con su amigo Carlos Mazalán, en RockearLasComunicaciones.net, contó detalles sobre su vida personal y profesional.

-Pablo, ¿qué representa Internet desde el punto de vista tecnológico de las comunicaciones en tu vida?

-Primero, representa un arma fundamental para averiguar data de cosas instantáneas que necesito, de lo que sea: información de espectáculos, de remedios, de palabras que no sé cómo se escriben, de historia. A los cinco segundos tenés la data... antes tenías que contar con la "Universitas", esas enciclopedias estudiantiles donde ir a buscar las cosas por el índice. Y representa también hoy mi plataforma de laburo.

-Hablaste de Internet y el trabajo, Internet y la música, Internet y el humor. Entonces: el trabajo, la música y el humor…¿En qué cambiaron?

-En el trabajo, es la autonomía perfecta. Primero, como soy hijo de padre publicitario, aprendí mucho de chico de todo eso y es un universo en el que me muevo muy cómodo, muy bien, mezclándolo con la creatividad. Una cosa es vender la publicidad, esta cosa de crearla y todo eso, y realmente me siento feliz haciendo ese laburo, entregando un material donde le puse todo aunque sea de una pavada. "Tengo que vender este sombrero, trato de ponerle cincuenta planos" y buscarle la vuelta creativa para que a mí me divierta mucho cuando lo entrego. ¿La otra cuál era?

-La música y el humor… que en realidad son tus caminos

-Son herramientas que yo uso para todo. Normalmente trato de combinarlas porque como me gusta hacer todo eso al mismo tiempo… si yo supiese hacer malabarismo, esgrima y cinco o seis cosas más y salto en garrocha también lo metería… ¿Entendés lo que quiero decir? Todo lo que me hace feliz, trato de combinarlo, siempre traté de combinarlo. Primero era más músico, cuando tenía veinte, veintidós; era música sola; después le encontré la otra vuelta que me divertía mucho y después ya no pude soltarlas.

-Muchas veces hablamos del humor y tus ganas de aconsejar a jóvenes. ¿Cómo se hace humor en esta época?

-Yo me estoy nutriendo mucho de lo que veo. Hoy los jóvenes tienen otra capacidad para hacer reír, no específicamente del cuadro de humor que teníamos nosotros, que era vestuario, guión, artistas, escenografía, todo eso. El humor significa hacer reír y hacer revivir… entonces tenés tres mil maneras de hacerlo diferente.

También me nutro todo el tiempo. Me gustaría agarrar a esos pibes y decirle: "Pará, ¿vos te das cuenta lo que estás haciendo y cómo lo estás haciendo? Bueno, fíjate lo que hacés, fíjate cómo lo podés pulir, porque te olvidaste de todo esto y te va a salir mucho mejor". Por ejemplo, Camila, mi novia, es una gran humorista, para mí es muy graciosa y a veces agarra algo, lo hace y yo lo veo y digo "pará, hacelo de nuevo" pero agregá todo esto. Ese laburo es el que a mí me gusta hacer también, el de abrirle la cabeza a la gente. Yo digo "este tipo tiene talento, ¿por qué no explorás esto?, ¿por qué no exploraste lo otro?". Es más o menos lo que me pasaba a mí cuando mi papá me decía a los veintidós años: "¿Por qué no repetiste eso que es buenísimo?", y yo no le daba bola.

-Tenés un montón de herramientas encima y sabés cómo usarlas. Ahí es donde voy también muchas veces con los consejos: todo lo que uno aprende, lo mete en la mochila y después usás esas herramientas en el momento que las necesitás.

-Exactamente, mientras más tengas, mejor.

Pablo Granados en conversación con Carlos Mazalán

-¿Es la curiosidad eso, no?

-Quería llegar a esa palabra. Es la curiosidad, y para mí para el humor y la generación de cualquier contenido, más allá que tenga humor o no, es importantísimo ser curioso y explorar la curiosidad. También te la podés plantear si no lo sos y decir "desde ahora voy a ser curioso". Cuando salís a la calle, con todo lo que te rodea, en todo hay contenido y en todo hay cosas para hacer y para explorar.

Lo que pasa es que la gente que no se dedica a esto, que labura en el banco, va a laburar siempre así…pero el que es creativo, va muy abierto y va viendo -por ejemplo- "qué pasa con estas dos señoras que están charlando, a ver de qué están charlando, etc.

-Hablemos un poco sobre vos como influencer. Tenés muchos seguidores y le ponés mucho trabajo a lo que hacés.

-Para mí, una cosa es tener muchos seguidores y otra cosa es saber comunicar. Son dos cosas distintas. Vos podés entrar a "Gran Hermano" y de un día para sumar tres millones de seguidores. Pero aún así, quiza no poder publicitar ningún producto porque no sabés hablar, no sabés comunicar.

Podés tener diez mil seguidores y ser un gran influencer. Existen esos nichos chiquitos que son grosos con diez mil, quince mil seguidores… y entonces me parece que el que trabaja de eso, que quiere crecer, paralelamente no tiene que pensar solo en subir seguidores, tiene que pensar en saber comunicar. La cuestión pasa por poder trabajar contando lo que una marca quiere y agregarle lo tuyo siendo creíble.

A ver, si todo lo que yo comunico me lo creo de verdad, cuando hago cosas que tienen que ver con la naturaleza, con las fechas patrias, con la historia, todo eso…y jamás pienso "voy a hacer esto porque funciona", lo hago porque lo siento y me parece que eso es lo que más me atrae ¿entendés? Me parece que eso es lo que llama también a la marca, por ejemplo, creo que también llama, que vos hagas lo que te gusta.

Yo, a veces, hago musicales y cosas que se ven mucho menos que otras y las hago igual, creo que la suma de todo eso hace tu personalidad y creo que la marca busca tu personalidad para argumentar, por ejemplo, si yo hago un desfile como los que hago en joda, yo sé que eso me garantiza ochenta y seis mil visualizaciones, pero no por eso hago uno cada tres días, porque yo le pego al lado de eso una canción que a lo mejor tiene ciento cincuenta mil vistas tocando el piano… pero ese soy yo también… No siento que debo dejar de hacerlo porque funcione más lo otro, ¿entendés? Entonces me parece que todo eso hace que la plataforma tenga otro tipo de riqueza y que la marca diga: "Ah no, este tipo no tranza, realmente hace lo que quiere".

Pablo Granados, un artista muy completo que se destaca como una persona que presta atención a la realidad para crear

-Te voy a pedir tres de tres: ¿cuáles son tus tres prioridades por redes?

-Twitter, Instagram… y no, no tengo tres… la tercera…tengo Facebook y a veces lo abro así para ver alguna foto vieja, pero no escribo casi nada.

-Decime tres "influencers" que te gusten.

-Santi Maratea, Dani "La Chepi" y Migue, obviamente.

-Y decime…por ahí esta es difícil, tres consejos para las marcas o para los chicos que generan contenidos.

-Los consejos: primero, ser uno tal como es, en el caso de un personaje, la palabra es esa…"ser auténtico", o sea, más allá de disfrazarse, hacer cosas y actuar y tratar de mostrarte también vos en los "posteos" como sos realmente. Eso es me parece un mejor consejo. Segundo, explotar la curiosidad como hablamos antes. Es fundamental. Y tercero, no pensar que uno solo puede hacer las cosas. Siempre hay que rodearse de gente talentosa y de gente capaz para aprender. Es fundamental. Solo no hace nadie nada.

Hay que estar atento a lo que hacen los amigos, lo que hacen los colegas, porque así se aprende también. Charly García no hubiese existido sin los Beatles, Fito no hubiese existido sin Charly. Es importante no pensar que lo que hace uno es lo mejor, porque no es así, al lado hay un montón de gente mejor y siempre es bueno ver, y crecer, se crece mucho. No es robar eso, porque si vas a la facultad de música y aprendés a tocar música clásica, no le robaste a Mozart…no, aprendiste de él.

Por Carlos Mazalán (@cmazalan), comunicador y presidente de Mazalán Comunicaciones.