En los compases finales previos a las PASO del próximo domingo, el ministro de Economía y precandidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Massa, decidió acelerar su estrategia del "plan platita" en un esfuerzo por robustecer aún más la adhesión de los sectores populares a su postulación presidencial.

Siguiendo esta senda, el funcionario intensificó su labor al propiciar incrementos en la asistencia social, la implementación de nuevos créditos destinados a los jubilados y, más recientemente, la notable reducción de la carga impositiva a través de la modificación del impuesto a las Ganancias sobre los salarios. Además, ha adelantado que se avecina un anuncio trascendental en forma de una suma fija para los salarios más bajos, un gesto que se materializará una vez transcurridas las elecciones Primaria.

Durante el transcurso del fin de semana, Massa se comprometió a brindar más detalles al respecto: "Habrá anuncios", afirmó con convicción. Puntualizó que su equipo está enfocado en "resolver el tema de la suma fija, particularmente para los salarios más modestos". Sin embargo, mantuvo cierto misterio en cuanto a los aspectos concretos de esta medida, como el monto y las dimensiones específicas del beneficio.Con este avance estratégico, el ministro demuestra su disposición a abordar uno de los aspectos centrales del reclamo esgrimido tanto por la vicepresidenta Cristina Kirchner como por los líderes sindicales del sector K, quienes han ejercido presión en la esfera pública en busca de una bonificación que alivie a los trabajadores más afectados por el impacto de la inflación.

El propio Pablo Moyano, una figura clave en el triunvirato de dirección de la Confederación General del Trabajo (CGT), reiteró su demanda en torno a este beneficio en la última semana. "El Gobierno ha priorizado la retribución de los trabajadores, pero estamos solicitando una suma fija para los gremios que no pueden siquiera equiparar el índice inflacionario", argumentó el líder camionero en una entrevista radial.

"Todo suma"

En plena vorágine electoral, cada movimiento cuenta y contribuye a la dinámica general. En esta coyuntura, la consigna parece ser "todo suma". Esta postura, sin embargo, no ha generado un nuevo desencuentro con los referentes del núcleo dominante de la dirigencia cegetista, que aglutina a los grupos denominados "gordos", "independientes" y el barrionuevismo. A pesar de que dichas fracciones rechazaron durante varios meses el planteamiento de una suma fija, instigado por Moyano y los sindicatos adherentes al sector K, y otorgaron prioridad al mecanismo de las negociaciones paritarias, ahora, inmersos en la campaña presidencial de Massa, valoran que se implementen acciones que mejoren los ingresos de los trabajadores.

En esta línea, un destacado referente de la central obrera expresó: "Cada medida suma", mientras la preparación para el acto de respaldo a la candidatura del tigrense toma forma en el estadio DirecTV Arena de Malvinas Argentinas, un acontecimiento crucial que tendrá lugar a tan solo cinco días de las elecciones primarias.

Con el 'Plan Platita', Massa busca reconfigurar las políticas económicas

Gerardo Martínez, el líder de la Unión Obrera de la Construcción de la República Argentina (UOCRA), profundizó en esta perspectiva: "Esta propuesta ya estaba dentro de las discusiones mantenidas con el ministro. Se trata de una necesidad imperante de actualizar los salarios formales que se ubican por debajo del umbral de pobreza, sin socavar por ello la instancia de las negociaciones paritarias. Así como se abordan las demandas de los salarios más elevados con la reforma en el impuesto a las Ganancias, también resulta fundamental resolver la situación de los sueldos más bajos debido al impacto negativo que genera".

En cuanto a la revelación de los detalles precisos de esta medida, Massa ha optado por mantener un perfil más cauteloso. "La divulgación será posterior a las PASO, dado que actualmente no es factible efectuar anuncios debido a la veda electoral", aclaran desde su círculo más cercano. En sus declaraciones públicas, el ministro simplemente ha insinuado su intención de "establecer un salario mínimo, un umbral que trascienda al mero salario mínimo vital y móvil y que incluya una suma fija para los trabajadores en activo". No obstante, no ha detallado ni el monto probable de la bonificación ni el nivel de ingresos al cual se aplicaría.

Lo que viene tras las PASO

En contraposición, Massa ha adelantado que, en la etapa posterior a las primarias, se tienen en consideración medidas adicionales para fortalecer los ingresos de los jubilados. Coincidentemente, en esta semana, el Gobierno tiene la responsabilidad de anunciar el aumento que experimentarán las jubilaciones y la Asignación Universal por Hijo (AUH) a partir del mes de septiembre, una modificación que, según cálculos preliminares, rondará el 23%.

La ambición del aspirante a la presidencia por Unión por la Patria radica en amplificar el impacto de este aumento mediante el anuncio de la emisión de nuevos bonos destinados a aquellos beneficiarios que perciben los ingresos más bajos, un enfoque destinado a mitigar los efectos de la inflación sobre estos segmentos vulnerables.

A medida que se despliega esta estrategia, se suman nuevas medidas a las decisiones ya implementadas por el Ministerio de Economía en las últimas semanas, todo en el contexto candente de la campaña electoral. En efecto, la semana pasada se anunció una nueva elevación del umbral salarial sujeto al impuesto a las Ganancias, el cual ascenderá a partir de agosto a $700.875 (remuneración bruta), un cambio que favorecerá a alrededor de un millón de trabajadores. Esta medida también contempla un aumento del 35% en las escalas del tributo, un ajuste que se aplicará con carácter retroactivo a enero de este año.

De manera paralela, a principios de este mes, el ministro autorizó un incremento significativo en una de las partidas más sustanciales del Ministerio de Desarrollo Social: las Políticas Alimentarias, que sustentan el programa de la Tarjeta Alimentar. Esta asignación adicional al programa totaliza la suma de $44.000 millones y tiene un impacto directo en la vida de más de cuatro millones de personas.

Previamente, y como resultado del último aumento en el salario mínimo, vital y móvil, también se incrementó la cuantía de los beneficios del plan Potenciar Trabajo, un apoyo dirigido a aproximadamente 1,3 millones de individuos, que, a partir del mes de agosto, alcanza los $52.750. Además, desde el mes de julio, Massa dispuso una ampliación en los límites de los créditos otorgados por la Administración Nacional de la Seguridad Social (Anses) a los jubilados, llegando a un tope de $400.000, y la implementación de un bono adicional de $20.000, que los jubilados percibirán esta semana, justo antes de las primarias.