El diputado nacional por el Frente para la Victoria (FpV), Héctor Recalde, anunció este martes que el proyecto para gravar la renta financiera, que el kirchnerismo prevé tratar en los próximos meses, "no ataca a los pequeños ahorristas" y precisó que se comenzaría a tributar a partir de los $100.000 anuales de renta. 

En tanto, la CTA cercana a la Casa Rosada anunció su apoyo al proyecto y su líder, Hugo Yasky, auguró que la iniciativa "va a ser discutida y aprobada este año".

Por su parte, el diputado nacional de Nuevo Encuentro, Carlos Heller, advirtió, en diálogo con DyN, que la medida habilitaría la modificación de las escalas del Impuesto a las Ganancias, y precisó que, según sus cálculos, el nuevo gravamen generaría una recaudación anual de $7.000 millones.

En una conferencia de prensa en la sede central de la CTA en la Capital Federal, Recalde explicó que, por un pedido de la presidenta del bloque de Diputados del FpV, Juliana Di Tullio, está trabajando para reunir los proyectos que presentaron distintos legisladores sobre el tema.

Además, detalló que también está abocado a hablar "con distintos sectores políticos y gremiales para sumar apoyos al proyectos y escuchar otras iniciativas".

Por otra parte, el diputado kirchnerista Edgardo Depetri negó que el proyecto para gravar la renta financiera sea "una medida electoralista" y consideró que "hay una voluntad del Gobierno de tratar el tema este año".

Sobre los detalles del proyecto, Heller puntualizó que la medida busca avanzar "sobre la especulación financiera, más precisamente, sobre la timba financiera" y aclaró que el tributo "excluye a los pequeños y medianos ahorristas".

"Según este proyecto, menos de $100.000 anuales de renta financiera estarían excluidos", afirmó Heller, que busca renovar su banca de diputado en octubre. El legislador agregó que, a partir de las tasas de interés actuales, con la aplicación del gravamen, "comenzarían a tributar los que tienen plazos fijos mayores a 600.000 pesos".

Los diputados coincidieron en que la iniciativa apunta a mejorar la distribución de los ingresos; mejorar la recaudación para atacar reclamos de sectores gremiales, como la baja del mínimo no imponible de Ganancias, el trabajo informal y el desempleo; y promocionar las inversiones.

Recalde, que es un reconocido asesor legal de distintos sindicatos, también señaló que, con esta medida, el kircherismo está "enfrentando a un poder muy fuerte, que es la patria financiera" y vaticinó "una presión fuerte" para que esta ley no se trate.

"Si tiene renta financiera, no es nada lógico que esté exento de tributar", sostuvo Heller que reveló que el Frente Renovador, que lidera Sergio Massa, también presentó un proyecto para gravar la renta, pero desde los 250.000 pesos.

Por su parte, Yasky anunció el apoyo "absoluto" de su central a la medida y consideró, en conversación con DyN, que los sectores gremiales alejados del Gobierno también "deberían apoyar el proyecto porque es algo que vienen pidiendo hace años".

En cuanto a la posibilidad de que la aplicación del nuevo tributo permita modificar Ganancias, Recalde sostuvo que el proyecto no explicita para qué deberían utilizarse los fondos.

Al respecto, el dirigente de Nuevo Encuentro indicó que "hoy la prioridad es atacar los dos problemas más importantes que tiene el país: la desocupación, que es del 7%, y el trabajo en negro, que asciende al 32%".

Recalde había presentado en junio del año pasado un proyecto que prevé gravar los intereses originados por depósitos de $300.000 o más en entidades financieras, bajo la modalidad de caja de ahorro, cuentas especiales de ahorro y plazo fijo.

Ahora, el diputado compatibilizará su iniciativa con otros proyectos, entre los que se encuentran uno del socialista Jorge Rivas, uno de Heller, y otros de distintos legisladores de la oposición.