Carlos Slim, el magnate mexicano de las telecomunicaciones con una fortuna valorada en más de 80.000 millones de dólares, cree que la vida sería mejor con una semana laboral de tres días.

"Debería tener más tiempo para usted durante toda su vida, no cuando llegue a los 65 y te jubiles", le dijo Slim a Christine Romans, periodista de CNNMoney.

Pero si la propuesta de Slim prospera, las personas también trabajarían jornadas más largas y más años. El empresario sugirió turnos de 11 horas y elevar la edad de jubilación a 75.

Slim sorprendió a unos cuantos en el verano cuando planteó una semana laboral de tres días, pero revalidó esa idea el martes. "Estoy seguro de que sucederá", dijo a CNNMoney, aunque admitió que no está seguro cuándo.

Mientras que "las máquinas deben trabajar 24 horas y los servicios deben trabajar tanto como sea posible", Slim indicó que las personas merecen más tiempo para el esparcimiento, la familia y para capacitarse para mejores puestos de trabajo.

El empresario de 74 años también cree que este cambio radical daría a los trabajadores jóvenes más oportunidades de incorporarse al mercado laboral y sería positivo para la economía y los mercados financieros.

"Es una sociedad del conocimiento y la experiencia. Uno tiene mayor experiencia y conocimiento cuando tiene 60, 65 y 70", dijo Slim.

Es una idea interesante, teniendo en cuenta de quién proviene: un multimillonario por esfuerzo propio cuyo patrimonio Forbes estima en u$s83.000. Slim ha estado alternando la corona del hombre más rico del mundo con el fundador de Microsoft Bill Gates, cuya fortuna está valorada en casi u$s81.000.

Slim incursionó en el mundo de la inversión antes de entrar a la secundaria, compró su primer bono con tan sólo 12 años de edad y luego acciones un par de años después.

Aun cuando la familia de Slim era acomodada, con el tiempo él construyó un imperio por su cuenta a través de una serie de inversiones inteligentes.

Una de sus posesiones más importantes es América Móvil, el gigante de las telecomunicaciones de América Latina. Las acciones de la compañía se dispararon hace unos meses luego de que Slim revelara planes para vender activos en respuesta a las nuevas leyes anti-monopolio y la reforma en telecomunicaciones de México.

Por otro lado, los precios descendentes del oro y del cobre han sido una espina clavada en Minera Frisco, la compañía minera de Slim.

Se necesita más inversión real

Sin embargo, Slim dijo que es un buen momento para ser inversor gracias a las bajísimas tasas de interés de los bancos centrales del mundo que tratan de fomentar el crecimiento.

"Las bajas tasas de interés son una gran oportunidad para la inversión. Pero el problema es que este dinero debe ir a la economía real, no la economía financiera", reprochó.

Sus comentarios coinciden con las preocupaciones de que las compañías gastan demasiado en la ingeniería financiera, como la recompra de acciones, en lugar de realizar gastos de capital que impulsen el crecimiento y la contratación.

"Ese dinero va principalmente a la economía financiera. Si una parte de eso llegara a la economía real y desarrolláramos infraestructura y otras inversiones, tendríamos construcción, empleo y mejores salarios", señaló.

Aunque Slim no quiso posicionarse sobre los recientes llamamientos para que los trabajadores ganen salarios más altos, reconoció que los precios han aumentado más rápido que los salarios, pero cree que los sueldos subirán a la par que un crecimiento más fuerte, mayor productividad y avances tecnológicos.