¿Quiere tener un canal propio de televisión? Antes de la llegada de Internet, la respuesta pasaba por disponer de capitales y contactos suficientes para montar una emisora tradicional.

Hoy, gracias a la Red, personas que no se desempeñan en los medios convencionales tienen audiencias que superan a las canales de TV abierta o por cable y, además, hasta dejan sus trabajos para dedicarse a realizar sus programas y vivir de los ingresos generados por la publicidad online.

YouTube, el portal de videos de Google, organizó este mes una jornada en Buenos Aires, en la que explicó las claves para que un usuario de Internet pueda crear y desarrollar con chances de éxito un canal propio de TV.

En el salón comedor de las oficinas porteñas de la firma, colmado por un centenar de periodistas de medios tradicionales y electrónicos, comunicadores sociales y blogueros, ejecutivos del portal precisaron el valor de YouTube para contar noticias; las claves para el desarrollo de la audiencia; y se conoció en directo el caso de un canal mexicano, “El pulso de la República”.

Jonathan Schmucler, encargado del área de socios de YouTube en América latina, detalló el enorme alcance de este portal:

• Se suben por minuto 300 horas de video.
• Se reproducen por mes 9 billones de horas.
• El 80 por ciento de las reproducciones en YouTube se realizan fuera de los Estados Unidos.
• YouTube tiene un billón (mil millones) de usuarios globales mensuales.

Amy Singer, responsable del área de socios de noticias de YouTube, recordó que el portal trabaja en forma sincronizada con el servicio Google News, donde entre las historias “top” aparecen los videos periodísticos más vistos.

Pero además de los medios tradicionales, que disponen de sus propios espacios, aparecen nuevas señales, como el caso de Vice News, un canal de noticias internacional creado “por y para una generación conectada”. 

Los documentales y series de noticias de Vice News son originales, aportan una mirada sin tapujos a algunos de los eventos más importantes y arrojan luz sobre historias de baja visibilidad en los medios tradicionales.

Poco ortodoxo ya veces irreverente, los videos realizados buscan llegar al meollo de la cuestión, bajo el lema “es auténtico”.

Hoy este canal en YouTube tiene más de un millón de suscriptores, y algunos de sus informes suman más de 4,6 millones de vistas, como el siguiente sobre el Estado Islámico:

Singer recomendó aprovechar los eventos como las elecciones presidenciales o legislativas para generar tráfico en los canales.

En los casos de esas actividades, el propio YouTube monta espacios propios nutridos por estos canales, como sucedió este mes con los comicios de medio término en los Estados Unidos. 

Ingresos y pirateríaAlrededor del 90 por ciento de la facturación de Google proviene por la publicidad, y YouTube es una de esas fuentes.

Schmucler explicó que pueden tener tres formatos publicitarios:

• La publicidad dentro del propio video, con un “banner” superpuesto generalmente en la base de la ventana de exhibición.
• Un “banner display” ubicado al costado.
• Una publicidad previa a la exhibición, denominada “in-stream”.

Para aprovechar estas vías de ingresos, el usuario debe habilitar la monetización. ¿Cómo se hace?

Cuando se sube, hay que hacer clic en la pestaña “Monetización” en la página de subida y seleccionar la casilla de verificación “Monetizar mi video”.

Allí se debe seleccionar los formatos de anuncios a habilitar para la pieza.

Luego se debe hacer clic en el botón “Guardar cambios”.

El video será sometido por YouTube a un proceso de revisión estándar antes de que los anuncios comiencen a aparecer. 

Si ya se subió, hay que ir al administrador de videos del canal, buscarlo, hacer clic en los botones “Editar” o “$” ubicados junto a la pieza.

En la pestaña “Monetización” del editor, seleccionar la casilla de verificación “Monetizar”.

Luego ha que seleccionar los formatos.

En el caso de la piratería de contenidos, el usuario puede realizar la denuncia ante YouTube, que demora, según dijo este ejecutivo, unas 24 horas en responder.

Los socios del portal que tiene un gran volumen de visitas o actividad pueden tercerizar en YouTube esta tarea de vigilancia. Para ello, deben entregar sus materiales "crudos" al portal, que busca a través de sus robots y algoritmos “coincidencia con terceros”.

¿Cuáles son las ventajas frente a otras plataformas, como Vimeo? Schmucler respondió: “es gratuito, no hay exclusividad, no un hay piso de videos”.

AudienciaCarolina Bertoni, gerente de alianzas de contenido para YouTube en la Argentina y Chile, advirtió que el portal “puede ser un repositorio pero eso sólo no genera audiencia”.

La clave para tener rating pasa por conseguir “fans” o “seguidores” (en la jerga de la plataforma) del canal, con una “clara propuesta de valor”.

Bertoni explicó que el público recorre el siguiente camino, que debe aprovecharse para el crecimiento del canal: descubre el video, luego lo ve, ve otros del canal y al final se convierte en “seguidor” o “fan”.

Cada uno de los pasos de este recorrido tiene sus propias claves. En el caso del descubrimiento del video, puede ser a través de las miniaturas que lo exhiben, la foto que aparece en su descripción. 

Bertoni recomendó que esta foto deba ser seleccionada en forma manual por el editor del canal. Sugirió que sea “clara y enfocada, en alta resolución, primer plano, interesante visualmente, con alto contraste”.

Otro elemento clave para favorecer el hallazgo del video es el título de la pieza. Por ejemplo, “Ebola: todo lo que hay que saber sobre la amenaza del virus”, como tituló el diario cordobés La Voz del Interior en el siguiente caso:

“Hay que pensar la pregunta que le hace el usuario a YouTube”, advirtió Bertoni, quien recordó que la plataforma es el segundo motor de búsquedas en Internet, sólo por debajo de Google.

Las descripciones que aparecen debajo del video también son importantes para su hallazgo, en especial sus dos primeras líneas. 

En estas descripciones se puede incluir enlaces a otros sitios, y sirven a YouTube a “comprender el video”. Esta descripción debe incluir palabras clave, contar una historia, señalar si forma parte de una serie de episodios, concordar con la miniatura y tener hipervínculos pertinentes a ella.

La plataforma ofrece reportes gratuitos del canal y sus videos, que permiten analizar cuánto tiempo fue reproducido y si el usuario vio más cosas. 

Esta herramienta es muy importante, según Bertoni, porque descubre cuándo el usuario dejó de verlo. Así, se observan fallas y aciertos en el contenido y la edición.

Otra herramienta sugerida para mantener al espectador en el canal son las anotaciones, con la inclusión de enlaces dentro del material, y llamados al final de la pieza para suscribirse o para ver otros episodios. 

Las listas de reproducción contribuyen a este fin: “No hay que dejar ninguno fuera” de estas series, dijo la ejecutiva. Incluso, en una lista se pueden incluir videos de otros canales.

Bertoni sugirió establecer una programación de publicación de los videos, como realiza “El pulso de la República” (ver más adelante sobre este caso), y anunciarla a través de redes sociales, además del propio canal. Y recomendó actualizar con frecuencia el espacio.

También incluyó entre sus consejos la interacción con el público, a través de los comentarios, como técnica para fidelizarlos al canal.

El usuario puede indagar más sobre estas recomendaciones y otras técnicas en este sitio de YouTube.

Un canal mexicanoEn la jornada se exhibió como caso de éxito a “El pulso de la República”, un canal mexicano exclusivamente en YouTube, que tiene más de 873 mil seguidores.  

El canal replica cada semana las noticias más recientes en un formato divertido, irreverente y sin límites, que ya existe en los Estados Unidos, pero fue el primero en adaptarse en México.

Tiene un guión creativo, lleno de contenido, una cámara e iluminación limitada, pero una producción profesional.

El siguiente video es el de presentación, con una original convocatoria a la suscripción, inspirada en la Capilla Sixtina de Miguel Ángel:

Chumel Torres, un ingeniero de 33 años, oriundo del estado de Chihuahua, creó hace dos años este canal, junto a un abogado.

Otras tres personas trabajan con ellos dos para mantener este espacio, que tiene picos de audiencia de unos 350 mil usuarios los lunes y los jueves a la mañana (hora de México), cuando emite sus programas, y que suma unas 5 millones de visitas mensuales.

Cabeza visible de estos “outsiders” del negocio de los medios, sin apoyo de algún grupo periodístico, producto exclusivo de Internet, Torres explicó que el público principal al que apuntan (“target”) tiene entre 14 y 44 años.

Aunque tiene 150 mil seguidores en su perfil personal en Twitter, el conductor advirtió que “la gente no migra entre redes sociales”, por lo cual recomendó hacer foco en cada espacio.

“YouTube es como un ‘hub’ enorme, rápido, inmediato”, aseguró Torres, quien manifestó su “odio” a los reproductores de videos de medios tradicionales, como el diario español El País.

“La gente ya no va a las páginas (de los medios), no le interesa la superproducción sino que sea entretenido”, afirmó Torres, quien reconoció que el 90 por ciento de los ingresos por la publicidad (se negó a precisar el monto de la facturación) viene de los avisos incluidos por ellos mismos en los videos, y no por YouTube.

Torres aseguró que no son “un canal de noticias, somos un canal de análisis de lo que ya pasó con rigor periodístico porque no digo mentiras”. 

“El pulso de la República” no es un noticiero coyuntural y no maneja noticias nuevas, no lo protege ningún tipo de aparato de noticias, canal o un network gigante. “Tratamos de hacer un programa que sea como réplica de lo que ya viste”, dijo Torres.

“La gente hace como que ve noticias, hace que le importa la política pero es cuando ve ‘El pulso de la República’ que se entera de las cosas aunque ya están en diez periódicos.  El problema es que no leen”, apuntó.