La tableta, la categoría de computadoras que relanzó Apple con su iPad en 2010, se prepara para iniciar una nueva etapa, con la llegada de la posibilidad de armarla a la medida, el gusto y la necesidad del usuario.

Esta variante, apreciada por los adictos a las tecnologías de la información (TI), existe en el mundo de las computadoras tradicionales desde hace décadas, pero hasta este año no estaba disponible para las “tablets”.

Hay un variante similar en el campo de los teléfonos móviles, con el denominado Project Ara, que impulsa Google y permite armar un celular por partes, aunque por ahora no pasó de la etapa de prototipos, según se pudo observar en el Mobile World Congress (MWC), el mayor encuentro anual de las tecnologías móviles, realizado en la primera semana de marzo en la ciudad catalana de Barcelona.

En el mismo escenario, una empresa española se adelantó nada menos que a Google y anunció su modelo de tableta modular.

La compañía ImasD exhibió su Click ARM One, que se venderá de forma limitada, aunque apunta un crecimiento fuerte en 2016. 

Click-ARM es una plataforma modular basada en la tecnología ARM que se compone de módulos que se pueden poner o quitar según las necesidades del usuario. 

Como la pantalla es uno más de ellos, es aplicable a cualquier tipo de dispositivo, desde “smartphones” a tabletas.

El equipo anunciado en el MWC cuenta con una placa base Click ARM PCB-HUB modelo 101 que integra Mini PCIExpress, Wi-fi a 2,4/5 Ghz, Bluetooth 4.0, HDMI y 2 USB. 

El Wi-Fi y el Bluetooth se pueden actualizar al agregar un módulo Click ARM o a través de las ranuras compatibles con puertos Mini PCIExpress.

El dispositivo tiene un procesador Core Exynos 4412 y una memoria RAM de 2GB, que al igual que los Cores Click ARM, puede ser sustituido. También posee una memoria interna de 16 GB que se puede cambiar o ampliar.

En una conferencia de prensa, en la que participó el enviado especial de iProfesional al MWC, voceros de la firma informaron que todo el diseño y desarrollo de la Click ARM One se realizó en España, al igual que la fabricación y montaje de la placa base y otros módulos. 

Pedro Peláez, director técnico y fundador de ImasD, detalló que La carcasa frontal incluye una pantalla Samsung Multitouch de 10.1 pulgadas con resolución de 1280x800p. 

La empresa lanzará una edición limitada de 1.000 terminales, repartidas en dos tandas de 300 unidades y una de 400. 

Comenzó a venderse desde el 2 de marzo a través de la página web del proyecto. El precio final de la tableta es de 289 euros (incluye gastos de envío), pero la entrega se realizará entre junio y septiembre.

Ventajas¿A quiénes va dirigido este producto? Un vocero de ImasD explicó a iProfesional que por un lado apuntan a los adictos y aficionados de las TI que prefieren armarse un equipo a su gusto y necesidad.

Además, no tendrá que cambiar de tableta porque una pieza se rompió o hay un modelo con mejores prestaciones en el mercado, sino que podrá combinar los componentes en cuestión.

La principal apuesta de ImasD son las empresas que necesitan de grandes flotas de terminales y que cuando se actualiza el software o la conectividad tienen que desechar esos equipos porque no se pueden actualizar.

Con la posibilidad de la modularidad, por ejemplo, se puede actualizar la tableta con conectividad 4G sin necesidad de cambiar el resto de los componentes, señaló la fuente, y postergar así el ciclo de obsolescencia.

Según se explicó en la conferencia de prensa, todos los componentes son intercambiables. Por ejemplo, se puede sustituir una pantalla por otra con más resolución, o un procesador más potente en el futuro. 

Además de los módulos de Click-ARM, también se pueden instalar componentes de terceros compatibles con los conectores mini PCI Express.

Click-ARM One es compatible con los sistemas operativos Android, Ubuntu, Tizen y Madext. Incluso se puede tener cada sistema instalado en un módulo y usar uno u otro con sólo conectar el módulo correspondiente.

Debajo, una lista de videos grabados por el enviado especial de iProfesional sobre esta tableta modular, de la cual también tomo estas fotografías:  

Project AraLa movida de ImasD se adelantó a la de Project Ara, que tuvo una presencia muy reducida en el MWC. La empresa estadounidense Yezz exhibió en el MWC sus módulos y un modelo de cómo quedaría el teléfono una vez montado, aunque en ambos sin funcionamiento.

Google lanzará una prueba piloto de estos móviles en Puerto Rico a finales de 2015. 

El fundador y presidente ejecutivo de Yezz, Luis Sosa, dijo durante el MWC que el precio posible de venta de estos teléfonos móviles modulares en Puerto Rico se aproximaría a los 200 dólares.

Google espera crear una gran industria alrededor de este nuevo modelo que ofrecerá, según la compañía, un acceso a Internet más fácil a los habitantes de los países emergentes.

La idea de este “smartphone” se compone de una estructura básica a la que se añaden con electroimanes los diferentes módulos como la pantalla, la batería, la cámara fotográfica y los sensores, entre otros. 

Google promete una duración de entre cinco y seis años para el armazón del “smartphone” frente a los dos años promedio en Europa. 

Para el gigante de Internet, este proyecto “podría redefinir el paisaje del móvil”, según aseguró  el director del proyecto, Paul Eremenko, en enero.

Cuentan con 6.000 millones de clientes potenciales: “Los 1.000 millones de usuarios actuales de ‘smartphone’ y los 5.000 millones de usuarios futuros”, especialmente de los mercados emergentes, afirmó Eremenko.

Sin embargo, la tendencia actual es la preferencia por teléfonos cada vez más finos y con una pantalla grande mientras que un modelo modular puede ser más voluminoso y con un diseño poco elegante, según se pudo observar en el MWC.

Además, los consumidores aspiran a una amplia personalización de los productos pero tienen problemas para decidir cuando se les ofrecen muchas opciones, explicó. “Tenemos que resolver esta paradoja”, reconoció Eremenko.

Hasta el momento, Google indicó un costo de producción de entre 50 y 100 dólares para un modelo básico, aunque todavía no habló de precios de venta.