El Gobierno decidió auxiliar a empresas distribuidoras y transportadoras de gas, que acumulan abultadas pérdidas por su crítica situación financiera.

Por un lado, a través de las resoluciones 3347 y 3348 del Ente Nacional de Regulación del Gas (Enargas) publicadas el lunes en el Boletín Oficial, se autorizaron aumentos en la tarifa de transporte de gas tanto para las empresas TGN y TGS, de 69% y 44%, respectivamente.

Para este segmento, es el segundo aumento de tarifas en 15 años. La medida tendrá un impacto promedio de 3% de incremento para los usuarios residenciales, mientras que para los comercios y la industria la suba será del 5% en promedio.

Pero, como en el anuncio de aumento de tarifas del año pasado, si el usuario residencial ahorra un 20% de consumo de gas con respecto al mismo período de 2014, no tendrá incremento; si ahorra entre 5% y 20%, el aumento de tarifa oscilará entre 1% y 3% y si no ahorra, la suba llegará hasta el 5%.

Esta medida regirá retroactiva al 1 de mayo por lo que los usuarios la sentirán en la próxima factura de gas que llegará entre fin de mes y los primeros días de julio.

En una nota enviada a la Bolsa de Comercio, TGN detalló que "el ajuste debe aplicarse a cubrir costos operativos e inversiones de capital" y explicó que "se trata del segundo aumento de tarifas otorgado a TGN desde julio de 1999. La empresa, que no percibe ningún tipo de subsidio estatal y observa 17 trimestres consecutivos de pérdida a nivel de su resultado operativo, confía que podrá alcanzar en el futuro un acuerdo de renegociación integral de su Licencia de Transporte que revierta esa tendencia".

Por otra parte, el Gobierno aprobó una asistencia económica transitoria por $2590 millones a abonar en 10 cuotas consecutivas para repartir entre las nueve distribuidoras de gas natural por redes, retroactivo también al 1 de mayo, con el fin de que puedan solventar gastos e inversiones asociadas al funcionamiento del servicio, y a cuenta de la Revisión Tarifaria Integral (RTI) que se lleve a cabo oportunamente.

Las involucradas son las distribuidoras Gas Natural BAN; Litoral Gas; Gasnor; Camuzzi Gas Pampeana; Camuzzi Gas del Sur; Distribuidora de Gas Del Centro; Distribuidora de gas Cuyana; Gasnea y Metrogas (una de las firmas más comprometidas y que pertenece a la estatal YPF).

Pese al aumento autorizado en las facturas de gas, a partir de abril del año pasado las distribuidoras acumulan una deuda que se estima supera los $1500 millones con los productores a los que les compran el gas que distribuyen, figurando entre los más afectados YPF, Pan American Energy (PAE), Total y Wintershall.

Las sumas de dinero que la Secretaría de Energía, de acuerdo con la Resolución 263/15, transfiera a cada una de las compañías, serán las establecidas por Enargas. Dichos montos serán afrontados con fondos del Estado nacional a través de la Secretaría de Energía, en moneda nacional y en forma mensual.

Para percibir esa asistencia, las distribuidoras deberán cumplir con las obligaciones que determine el ente regulador, destinar parte de los fondos a cancelar las deudas contraídas y vencidas hasta el día 31 de diciembre de 2014 con las empresas productoras de gas natural, y no podrán acumular más deuda por compras de gas natural realizadas a partir de la fecha de entrada en vigencia.