El 74% de las empresas argentinas tuvo este año un incremento de las ventas y de la rentabiliadad en dólares mayores a las expectativas, aunque señalaron la falta de oportunidades que ofrece el mercado de capitales local.

Los resultados se desprenden de una encuesta que realizó la consultora EY Argentina, en la que participaron más de 100 compañías que representan a los principales sectores de la economía.

Aunque los resultados exhibidos en 2015 fueron positivos, indicaron que "en este período continuó la reducción en la utilización de la capacidad instalada". "Esto nos hace pensar que los incrementos pueden estar asociados a un efecto tipo de cambio. La perspectiva de rentabilidad para el 2016, menor a la de 2015, parece estar relacionada con un ajuste gradual de esta variable macroeconómica", señaló Pablo De Gregorio, socio de EY Argentina, durante la presentación de los resultados.

El directivo, al hablar ante un auditorio de 150 ejecutivos que se dieron cita en el Salón Bustillo del hotel Llao Llao, puntualizó que de la encuesta tomaron parte representantes de 110 empresas, que dan trabajo a unos 200 mil empleados y facturan 800.000 millones de pesos cada año.

Según De Gregorio, de la encuesta surge también que "la generación de excedentes financieros en un contexto de restricción para el pago de dividendos tuvo un efecto en la disminución del endeudamiento, en comparación con 2014".

"Las empresas han realizado mayores inversiones pero de menor envergadura, aunque el 81 por ciento de los encuestados manifestó tener proyectos en cartera que podrían lanzarse en los próximos los años, incluso de importancia mayor a los llevados a cabo en 2015", señaló el socio de EY Argentina.

Sin embargo, la seguridad jurídica fue uno de los principales reclamos de los ejecutivos, con objeto de "destrabar el círculo vicioso donde sólo encuentran financiamiento proyectos pequeños, de alta rentabilidad y financiados a corto plazo".

En este sentido el 70 por ciento de los encuestados identificó a la estabilidad de los marcos regulatorios, el correcto funcionamiento del poder judicial y la estabilidad fiscal como las principales acciones para lograr ese objetivo.

"Estas acciones debieran ser parte de políticas de Estado para las próximas administraciones", señalo el ejecutivo de EY.

Respecto al contexto internacional, con turbulencias recientes por ejemplo en China, uno de los socios a los que apuesta el gobierno de la presidenta Cristina Fernández, el 64 por ciento de los encuestados lo ve como "negativo o muy negativo" para sus empresas.

"El mundo estará complicado, pero se podrán captar oportunidades", auguró De Gregorio, luego de mencionar que los ejecutivos identificaron a la energía, la infraestructura y el agro como los sectores que tendrán "mayor potencial en los próximos años".

Con respecto a cómo financiaron las compañías sus proyectos, los bancos locales continúan siendo la principal fuente de financiamiento externo: El 52 por ciento de los encuestados pensó en utilizar el mercado de capitales pero "sólo el 8 por ciento encontró soluciones en él, lo que indica que la ley aprobada el año pasado, así como su reglamentación, no ha generado los efectos deseados".

De Gregorio expresó al respecto que "la intención de tomar endeudamiento sigue vigente, la gran mayoría de las compañías así lo expresó, pero el financiamiento estructural de largo plazo no se ha recreado desde la crisis del 2002".

"El mercado de capitales sigue siendo una fuente marginal de financiamiento de proyectos", resumió.