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The Wall Street Journal señala que el fin del cepo al dólar que prometió Macri podría restaurar la confianza de los capitales internacionales en Argentina
25/11/2015 - 10:50hs

El cambio de gobierno en la Argentina con el triunfo de Mauricio Macri de Cambiemos en el balotaje ante el oficialista Daniel Scioli, ya genera expectativa en Wall Street.

Aguardan con ansias la promesa de campaña de que se levantará el cepo al dólar y habrá un único tipo de cambio, generando una depreciación del peso. Esta medida política atraerá inversiones extranjeras, aseguran en el mercado de Estados Unidos.

The Wall Street Journal (WSJ) publicó un artículo titulado "La llave de la devaluación para atraer inversores de vuelta a la Argentina" en el que advierte los perjuicios de las restricciones cambiarias y la coexistencia de dos tipos de cambio: el oficial, que encarece los precios internos respecto a las divisas, y el paralelo, que hace más competitivos a los productos nacionales, pero que se negocia en un mercado informal.

"Muchos inversores extranjeros no quieren entrar (al país) mientras el peso está artificialmente alto, temiendo que ellos sean los únicos que acusen el impacto de una devaluación en ciernes. Pero una vez que la devaluación sucedió, las cosas son más claras. Una relajación simultánea de los controles monetarios quitaría además el principal obstáculo para aquellos inversores preocupados por no poder retirarse", indicó WSJ, debido a los impedimentos oficiales para el giro de dividendos al exterior.

Y cita el ejemplo de Richard House, un trader que visitó Buenos Aires y a quien la existencia de un mercado negro disuadió de invertir en el país.

"El señor House, jefe de deuda de mercados emergentes en Standard Life Investments, tuvo que pagar en los hoteles locales y restaurantes al tipo de cambio oficial, de un poco más de 9 pesos por dólar, lejano del más caro que él encontró en la calle, el mercado negro que tarifa alrededor de los 16 pesos", describió.

Esa experiencia le dejó la sensación de "los cambios radicales que necesita la volátil economía argentina para resucitar, incluyendo a la moneda".

"Todos saben que allí habrá una devaluación", dijo House, cuya firma supervisa activos financieros por u$s379.000 millones en todo el mundo.

Otro testimonio es el de Marcelo Assalin, de NN Investment Partners, quien decidió retirarse de la Argentina a principio de 2014, ante la incertidumbre sobre la posibilidad de girar dinero fuera del país.

Assalin reconoció que estaría tentado a retornar si la administración de Macri avanza con las reformas que prometió en la campaña.

"Los inversores no van a volver a invertir en Argentina hasta que no haya una devaluación de su moneda. Necesitan confiar en que no caerán en una nueva trampa", explicó el agente cuya firma administra u$s191.000 millones en activos globales. "Es un extenso país con grandes oportunidades", agregó.

Entre varias debilidades económicas, WSJ resalta el peso sobrevaluado, las reservas internacionales inferiores a u$s26.000 millones y una inflación estimada en 25% anual para 2015.

Denise Prime, una especialista en inversiones en mercados emergentes de GAM Holding de Londres, prevé que el futuro Gobierno debilitará el peso un 25% en diciembre junto con un levantamiento de las retenciones a las exportaciones de soja. "Esto debería incentivar a los agricultores a vender su cosecha en el mercado internacional y mostrar las ventajas de una moneda más débil", comentó.

Denise Prime espera que el crecimiento económico argentino tome impulso en la primera mitad de 2016, con un Banco Central que se encontrará obligado a elevar las tasas de interés para atacar el salto inflacionario posterior a la devaluación.

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