El productor de semillas transgénicas Monsanto considera que la oferta de compra que presentó este lunes Bayer es insuficiente. Este primer rechazo va a obligar al grupo alemán a ser más generoso y aumentar la oferta de 62.000 millones  que puso sobre la mesa para poder salvar la operación y evitar quedar descolgada en el proceso de consolidación de esta industria. El desenlace podría llevar a BASF a actuar, ya que esta empresa podría también estar interesada en Monsanto.

Bayer valoró el negocio del conglomerado agroquímico en u$s122 por cada acción. Los analistas de Wall Street ya anticiparon que Monsanto se opondría a esta primera oferta y que los alemanes no tendrían más remedio que endulzarla, elevando su valor o mejorando las condiciones del desembolso. Pero Bayer está ya muy endeudada y eso limita sus opciones.

Aunque el rechazo a la primera oferta fue rotundo, la dirección en St. Louis se deja la puerta abierta para explorar un acuerdo con Bayer porque consideran que la fusión tiene sentido estratégico. En el parqué neoyorquino se asegura sin embargo que el grupo alemán no tiene opciones mientras ofrezca un precio que esté por debajo de los u$s135 la acción.

La última oferta representaba ya una prima de casi el 40% para los propietarios de Monsanto cuando se toma como referencia el precio al que se negociaban las acciones el 9 de mayo, antes de circular los primeros rumores sobre la adquisición. Si finalmente prospera, será la mayor compra realizada por Bayer en el extranjero y con Monsanto creará el mayor grupo agroquímico del mundo.

La multinacional estadounidense es ya el principal vendedor de semillas transgénicas del mundo. El movimiento, de hecho, tiene lugar dos décadas después de que empezara a comercializar estos productos modificados con técnicas de ingeniería genética. Además, desarrolla otros productos químicos destinados a mejorar la productividad en el sector de la agricultura.

La oferta de Bayer por Monsanto sigue a la compra de la suiza Syngenta por parte de ChemChina, buscando también convertirse en el primer actor de la industria agroquímica con el 28% del mercado. También están en proceso de fusión Dow Chemical y DuPont, aunque en este caso la compañía resultante se separará en tres sociedades independientes. BASF ya mostró su interés por Monsanto.

Los títulos de Monsanto se apreciaron un 2% tras conocerse su rechazo, porque se da por hecho que Bayer hará un nuevo intento por forjar un acuerdo que sea definitivo. La volatilidad del mercado les está obligando a sumar fuerzas. La adquisición, en el supuesto de que prospere, estará sujeta en cualquier caso al examen de las autoridades reguladoras tanto en Estados Unidos como en Europa.