iProfesionaliProfesional

Dejaron de ser el objeto para controlar únicamente la dirección del vehículo para convertirse en un dispositivo desde donde se maneja toda la tecnología
29/09/2016 - 12:10hs

Muy pocas veces se aborda la descripción de un auto desde el interior, siendo las líneas exteriores las que más cautivan a cualquier cliente.

Sin embargo, por dentro los autos demandan tanta atención por parte de los diseñadores como por fuera, y cada uno de los elementos que conforman desde el tablero hasta las butacas, son parte del trabajo exclusivo de un experto.

Así, el volante es uno de los objetos que más cambios ha mostrado en el tiempo. No solo por sus texturas o "grip", sino también por su utilidad.

En los últimos años, el volante dejó de ser el accesorio que guía la dirección del auto para convertirse en un dispositivo tecnológico, ya que desde los "botoncitos" que se distribuyen en todo su diámetro se puede prender o apagar la radio, hacer una llamada por celular o activar la velocidad crucero, entre otras funciones.

Para mostrar estos cambios, Ford presentó la historia del volante según la evolución del Mustang. El modelo, que por primera vez se vende en el país, refleja las modificaciones que se fueron haciendo en el interior y cómo se fue convirtiendo su funcionalidad. Además, en este caso, cuenta con las tan "deseadas" levas al volante, un accesorio que cualquier fanático de los autos quiere tener el poder de controlar.

1964: La primera generación del Mustang introdujo el patrón clásico de capó largo y cabina angosta que se transformó en el estilo de la línea. El interior, de doble cabina, tenía un volante emblemático de tres rayos de aluminio con aro símil madera y bocina en el centro. Su gran diámetro, de 16 pulgadas, facilitaba las maniobras, ya que la asistencia hidráulica era opcional.

1967: La dirección ajustable en siete posiciones permitía elegir la mejor posición de manejo, además de facilitar la entrada y salida del auto. La dirección asistida con relación más rápida (20, 3:1) daba una sensación más deportiva.

1968: El Mustang introdujo la columna de dirección retráctil para reducir la posibilidad de lesión en caso de accidente, aumentando la seguridad. El volante de dos rayos también ganó una sección central y acolchada, con control de bocina en el aro central.

1974: La segunda generación del Mustang ganó un volante de dos rayos revestido en cuero. La opción de dirección asistida con piñón y cremallera permitió ofrecer un volante menor de 15 pulgadas en lugar del estándar de 16 pulgadas.

1979: El volante de dos rayos fue substituido por uno de cuatro que más tarde fue compartido con otros vehículos de Ford. Los comandos de limpia parabrisas y luces se alojaron en la columna de dirección. El control de velocidad crucero, ofrecido en versiones de transmisión manual, era controlado por botones en el volante.

1984: El Mustang SVO (Special Vehicle Operations), legendaria versión de alta performance con motor turbo de cuatro cilindros, trajo un volante de tres rayos con ajuste de altura y profundidad, era más grueso y de menor diámetro con una apariencia deportiva. Los logotipos Ford y SVO estaban gravados en el centro del revestimiento de cuero.

1990: El Mustang recibió su primer airbag de serie. Instalado en el centro del volante. Así, la bocina fue transferida hacia dos botones laterales, accionados por los pulgares del conductor. Los botones del control crucero también ganaron una posición más ergonómica.

1994: La cuarta generación del Mustang fue un homenaje al modelo original de 1964, con cabina doble y formas talladas en el panel. Varios comandos se ubicaron para un uso más simple, aumentando la practicidad y seguridad. La bocina, volvió al centro del volante, integrada en la tapa del airbag.

2005: El volante de tres rayos de la quinta generación del Mustang fue una relectura del modelo de 1965/67, con rayos de polímero u opcionalmente, de aluminio. A diferencia de los volantes en los que se inspiró, este volante estuvo revestido en cuero.

2010: Con la tecnología SYNC, muchos botones fueron agregados para los comandos de voz del teléfono, música, radio y otras funciones. El emblema central de acrílico fue cambiado por uno de aluminio pulido, con el caballito estampado o la cobra en el caso del Shelby GT500. Los acabados de aluminio o cuero daban unidad a la cabina.

2013: El volante del Mustang se transformó en el centro de control tecnológico del auto. Incluyó un botón de cuatro vías, además de un "OK" para el control de los instrumentos de visualización de la pantalla. En los modelos Boss 302 y Shelby GT500, era revestido en cuero Alcántara.

2015: En la sexta generación del Mustang, el volante, totalmente rediseñado, incorpora hasta 20 botones. Los de la derecha comandan el SYNC y la radio. Los de la izquierda, controlan el control de velocidad crucero adaptativo y la pantalla del panel de instrumentos. Los controles de marcha al volante "paddle shift" fueron ofrecidos por primera vez en el Mustang con transmisión automática. Su airbag circular fue proyectado especialmente.

Es también el volante de menor diámetro de la marca, con apenas 14 pulgadas. Los rayos de aluminio tienen un acabado en los bordes para que el conductor solo toque el cuero y tenga mejor dominio del volante.

GT350: Las versiones homologadas para la calle que más se aproximan a un vehículo de competición son los Mustang Shelby GT350 y GT350R con volante de base recta y revestimiento de Alcántara, inspirado en los autos de carrera. Sus controles permiten hacer innumerables ajustes en el vehículo sin sacar las manos del volante, incluyendo el nivel de asistencia de la dirección eléctrica, la suspensión, modos de dirección y afinamiento del escape. En el Shelby Cobra, también

Temas relacionados