A Mauricio Macri no le cierran las cuentas por ningún lado.

En primer lugar, si se aprueba el proyecto opositor del Impuesto a las Ganancias, la caja fiscal se verá seriamente comprometida. 

En este sentido, el titular de la AFIP, Alberto Abad, sembró incertidumbre este lunes en el equipo de Gobierno cuando transmitió el impacto que la iniciativa podía tener sobre las arcas del Estado: podría ser de $130.000 millones. 

Esta cifra, por cierto, representa cerca del doble de la estimada cuando la iniciativa fue aprobada en Diputados. 

A Macri tampoco le cierran las cuentas en el Congreso. Esto, en un contexto en el que el apoyo de los gobernadores es decisivo, ya que enfrenta el riesgo de una dura derrota legislativa. 

En los planes originales del Gobierno, el Senado debería ser una prueba relativamente fácil de sortear.

Primero, porque es la Cámara en la cual los gobernadores tienen influencia directa. 

Segundo, porque para la mayoría de estos mandatarios provinciales es mayor el costo por la pérdida de recursos coparticipables de Ganancias que un rédito político si la clase media siente el alivio impositivo.

Aprovechando sus necesidades de caja, el macrismo dejó trascender que no vetaría la ley si finalmente es aprobada y que le cargaría dicho costo a los gobernadores, que verían diezmados sus recursos para financiar obras públicas. 

"Si sale el proyecto opositor, Macri no va a vetarlo", aseguran desde la Rosada. Pero habrá menos dinero para girar a las provincias y la responsabilidad será de los senadores que apoyen la iniciativa y de los opositores como Sergio Massa. Así, Macri evitaría pagar el costo político de ponerle un freno.

El Ejecutivo presiona con esta jugada porque en el tramo final, previo al tratamiento del proyecto, no está logrando el apoyo suficiente para frenar la propuesta que ya aprobaron en Diputados el FpV más el Frente Renovador y el bloque Justicialista

Hasta ahora, todo indica que el recuento estará parejo, con una aparente ventaja para la oposición. 

Es por eso que las negociaciones están al "rojo vivo", al punto que el kirchnerista Héctor Recalde llegó a hablar de "aprietes" a gobernadores en una reedición de la "lógica del látigo y la billetera".

Desde el oficialismo exponen otra visión: argumentan que se generará un “rojo fiscal” de tal magnitud que hará imposible socorrer a las provincias cuando necesiten de fondos urgentes para afrontar sus obligaciones.

Tras los contactos informales de los últimos días, ahora comienza el turno de las reuniones formales, que iniciarán este martes cuando se reúna la Comisión de Presupuesto y Hacienda de la Cámara alta, presidida por Juan Manuel Abal Medina. Están citados a participar los gobernadores, la mayoría de ellos peronistas. 

Por lo pronto, el objetivo del oficialismo es tratar de que se le introduzcan modificaciones a la iniciativa para así poder dilatar la discusión el mayor tiempo posible. 

Fuentes del macrismo aseguraron a iProfesional que la estrategia de máxima es que se sancione una ley más "benévola" con las arcas públicas antes de fin de diciembre.

De no lograrlo, el segundo objetivo es tratar "patear" la discusión, en lo posible, para marzo de 2017. 

Con la calculadora en manoDesde la oposición, especialmente desde el espacio de Sergio Massa, acusan al macrismo de utilizar la “billetera” para amedrentar a los mandatarios provinciales y de querer convencerlos sobre las pérdidas que van a sufrir, en vez de poner sobre la mesa “los beneficios que va a tener la gente” si se aprueba el proyecto. 

De hecho, desde la Jefatura de Gabinete, al mando de Marcos Peña, ya enviaron señales inequívocas de que el gran costo lo van a terminar asumiendo los gobernadores. 

En concreto, advirtieron que tendrán que echar mano a dos cuestiones:

- Reasignar los $15.000 millones ya previstos en concepto de transferencia directa a las provincias 

- Replantear otros $15.000 millones originalmente previstos para obras que figuran en el Presupuesto 2017.

Desde la consultora Economía & Regiones, fundada por el actual ministro de Interior, Rogelio Frigerio, advirtieron que si la iniciativa opositora prospera, el costo fiscal neto para el conjunto de provincias ascenderá a casi $23.000 millones, lo que a su vez representa: 

-El 33% de la nómina salarial mensual promedio estimada para 2017. 

-Una vez y medio el gasto mensual promedio en obra pública. 

-Casi dos meses de erogación en bienes y servicios. 

"Una reforma como la presentada por la oposición generaría un importante costo fiscal que incrementaría el déficit nacional y provincial. Además, propone financiar dicho costo acudiendo a la creación de más impuestos, desincentivando así la inversión en activos financieros, en detrimento del ahorro, y encareciendo el financiamiento local", advirtieron desde E&R. 

Acto seguido, agregaron: "No debe perderse de vista que las provincias serán las mayores perdedoras de los cambios sobre el impuesto a las Ganancias, a la vez que detentan la mayor responsabilidad en el gasto público, al tener bajo su órbita la prestación de la salud, la educación y la seguridad". 

También hay un grupo que mantiene una postura intermedia y que es más proclive a introducir modificaciones, con lo cual el proyecto debería volver a Diputados.

Doce gobernadores son los que apoyan a Macri y le dieron la espalda a la oposición. En ese grupo se encuentran:

-Miguel Lifschitz (Santa Fe)

-Alberto Weretilneck (Río Negro)

-Sergio Uñac (San Juan)

-Gerardo Morales (Jujuy)

-Alfredo Cornejo (Mendoza)

-Ricardo Colombi (Corrientes)

-El jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta.

Entre los mandatarios que criticaron abiertamente la propuesta figuran:

- Juan Schiaretti (Córdoba)

- Juan Manuel Urtubey (Salta)

- Gustavo Bordet (Entre Ríos)

- Hugo Passalacqua (Misiones)

- Omar Gutiérrez (Neuquén)

En la otra vereda, contrarios a la postura del Gobierno, inicialmente aparecen:

-Carlos Verna (La Pampa) 

-Mario Das Neves (Chubut) 

-Alicia Kirchner (Santa Cruz) 

El problema para el macrismo es que muchos de los mandatarios que cuestionaron al proyecto opositor es muy poco lo que pudieron hacer para convencer a sus diputados durante el debate del martes pasado. Y estas dificultades también se trasladan a la votación que se dará en Senadores. 

1. - CórdobaDesde un principio, el cordobés Juan Schiaretti se pronunció a favor del oficialismo. Sin embargo, cuatro de los seis legisladores de su partido (Unión por Córdoba) se declararon a favor de la iniciativa de la oposición.

En el Senado, la ayuda que puede dar es muy escasa, con tres senadores. Dos pertenecen a Cambiemos y Carlos Alberto Caserio responde al exgobernador José Manuel de la Sota, aliado de Sergio Massa.

2. - Salta

Otro de los que más cercanos al Gobierno se mostró es el salteño Juan Manuel Urtubey.

Esa provincia tiene siete diputados, de los cuales sólo tres responden al gobernador, con el agravante para el macrismo de que los mismos igualmente votaron con la oposición. De hecho, uno de ellos es Pablo Kosiner, quien redactó parte del texto. 

Ahora, en la contienda que se dará en el Senado, cuenta con dos legisladores. Uno es su hermano Rodolfo, quien ya adelantó que votaría a favor en general y pedirá modificaciones en particular. Luego está María Cristina Fiore Viñuales.

3. - Santa Fe

El mandatario santafesino, el socialista Miguel Lifschitz no tiene senadores.

Por otro lado, en la Cámara de Diputados, sus legisladores estuvieron ausentes.

4. -Río Negro

Alberto Weretilneck se pronunció también en contra del proyecto de Massa “porque perjudica al conjunto de las provincias".

Sin embargo, tampoco cuenta con representantes en la Cámara alta y, además, no tuvo ningún peso para torcer voluntades en Diputados. 

5. - San Juan

Se trata de un caso particular. El gobernador Sergio Uñac se opone a la restitución de las retenciones a la industria minera.

Sin embargo, en esta provincia el que tiene influencia sobre los legisladores es José Luis Gioja, quien políticamente está en la vereda de enfrente de Macri. Y los senadores peronistas responden a Gioja o al kirchnerismo.

6. - Entre Ríos

Paralelamente, el entrerriano Gustavo Bordet se pronunció en contra del proyecto opositor.

Sin embargo, sus dos diputados -que en la teoría le responden- se alinearon con la oposición.

El macrismo ahora espera que sus dos senadores, Pedro Guastavino y Sigrid Kunath, no repitan la misma estrategia. 7. - MisionesHugo Passalacqua, el gobernador de esta provincia, se expresó a favor de Macri.

Así, el Gobierno espera contar con las adhesiones de su provincia.8. - NeuquénOmar Gutiérrez también se manifestó en contra del proyecto opositor.

No obstante, se repitió la misma situación que con otros gobernadores: en la Cámara baja, sus diputados se ausentaron a la hora de la votación.

En la Casa Rosada ponen fichas en la senadora Lucila Crexell, quien ya adelantó que no adherirá al texto que obtuvo media sanción.

9. - Chaco

De estos legisladores, el Gobierno puede esperar el aporte de Eduardo Aguilar.

En cambio, no puede ilusionarse con sumar las voluntades de María Inés Pilatti Vergara, perteneciente al kirchnerismo duro.10. - CatamarcaEn cuanto a la gobernadora Lucía Copacci, los diputados de su provincia, Verónica Mercado y Néstor Tomassi, votaron a favor del proyecto que restituye las retenciones a la mineria.

El macrimo espera algún gesto de la senadora Inés Blas, que responde a la gobernadora y ya adelantó que apoyará la iniciativa que "no afecte las finanzas de su provincia".

Del otro senador, Dalmacio Mera, se espera vote en contra el proyecto de la de Massa.

11. - La RiojaSergio Casas es de los que el Gobierno considera “confiables”.

Sin embargo, su apoyo luce limitado: en la Cámara baja, sus diputados se ausentaron a la hora de votar.

En el Senado, el macrismo se espera alguna señal de Hilda Aguirre, mientras que Teresita Luna es una incógnita.

Carlos Menem no suele estar en las votaciones, pero de hacerlo, el Gobierno aspira a contar con su voto. 

12. - Chubut

En este caso, la pelea del macrismo parece perdida.

Los dos senadores, Juan Mario Pais y Nancy González responden al kirchnerismo.

13. - Tierra del FuegoLa senadora Miriam Boyadjian también responde al FpV.

De esa provincia, Julio César Catalán Magni se alineará a lo que decida el bloque mientras que José Ojeda es el único que podría hacer caso a la gobernadora Rosana Bertone, más cercana al Gobierno por su dependencia fiscal.

14. - Tucumán

Juan Manzur se distanció del oficialismo con la reforma electoral y sus diputados ya votaron alineados con la oposición.

Los senadores José Alperovich y Beatriz Mirkin no son causas perdidas para la Casa Rosada. De hecho, las negociaciones con ambos legisladores de esa provincia, por estas horas, son intensas. 

15. - Santiago del Estero

El Frente Cívico por Santiago venía mostrando el mismo alineamiento con el Gobierno que exhibió durante la era K. Pero esto no redundó en un apoyo total.

Ya rechazaron la reforma electoral y en la votación en Diputados por Ganancias se alinearon con el resto de la oposición.

El Gobierno espera ver ahora la actitud que mantendrán Gerardo Zamora y Ada Rosa Itúrrez de Cappellini.

16. - San LuisCambiemos supo tener buena sintonía con los senadores Adolfo Rodríguez Saá y Liliana Negre de Alonso, pero en los últimos tiempos eso parece haber cambiado. 

En tanto, Macri nada espera de los senadores que responden a Gildo Insfrán (Formosa), Carlos Verna (La Pampa) y de Alicia Kirchner (Santa Cruz).

A este listado se suma Jaime Linares, senador bonaerense por el GEN y Fernando "Pino" Solanas, quienes se alinearán con la oposición. 

La "calculadora" del macrismo está al rojo vivo. Son horas decisivas para el Gobierno, que sabe que cada voto de los senadores cuenta. 

A algunos legisladores les agita el fantasma del déficit fiscal y de la futura falta de recursos para obras públicas. Con otros, intenta una estrategia de acercamiento y seducción. 

Todo esfuerzo cuenta para el oficialismo en este intento final por frenar los cambios en Ganancias.