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Los adultos deben estar atentos al comportamiento de los niños de manera de identificar si están siguiendo el juego y poder detenerlos a tiempo
10/05/2017 - 14:45hs

La asociación civil Argentina Cibersegura difundió consejos para identificar y detener el desarrollo del juego "La ballena azul" que involucra a niños y adolescentes de todo el mundo.

El juego consiste en una serie de 50 retos que son publicados a través de grupos privados en redes sociales.

Los administradores proponen distintas pruebas y a medida que avanzan los días, los adolescentes deben cumplir esas consignas que cada vez son más arriesgadas.

Desde ver, sin interrupciones, más de 24 horas de películas de terror hasta cortarse el brazo para crear un “dibujo” de la ballena azul en distintas partes del cuerpo.

El último desafío, es el de quitarse la vida. Si bien se consideraba que el juego correspondía sólo a Rusia donde provocó una ola de más de 130 suicidios, en los últimos días se registraron casos en Brasil, Colombia y Uruguay.

Los administradores del juego contactan a los chicos a través de invitaciones a grupos privados de redes sociales.

En América latina se da mediante Facebook y WhatsApp. Incluso entre los mismos adolescentes circulan invitaciones. Se les pide a los niños comunicarse con el administrador y subir fotos de cada desafío. Si una de las víctimas decide abandonar el juego, el administrador comienza a extorsionar al adolescente.

La “ballena azul” amenaza con dañar a sus seres queridos o hacer pública la información personal compartida en el grupo a lo largo del juego.

Los signos a los que es importante estar alerta, son, según informó la entidad a iProfesional en un comunicado:

* Comentarios en los perfiles de las redes sociales de los menores que hagan referencia al juego: “Soy una ballena” “Ballena azul”, etc.

* Si los adolescentes cambian la pantalla al ver a un adulto acercándose a la computadora.

* Encontrarlos despiertos en la madrugada haciendo distintas actividades como ver videos, escuchar música o incluso salir de la casa.

* Que tengan dibujos o fotos relacionados con la ballena.

* Prestar atención a actitudes extrañas y cambios de humor.

* Estar atentos a si el adolescente presenta cortes en el cuerpo, lastimaduras, moretones, etc.

Los siguientes consejos recomiendan qué hacer y cuál es el rol de los adultos en estos casos:

* Generar un diálogo fluido entre con los adolescentes para conocer qué es lo que hacen en Internet, en lugar de alejarse y dejarlos solos en estas actividades. Siempre respetando su privacidad.

* No negarles el acceso a Internet. No privarlos de conocer y disfrutar de un medio de comunicación y aprendizaje tan rico, porque, además, con él están adquiriendo habilidades que van a necesitar para el futuro.

* Establecer un equipo entre padres, donde trabajen en conjunto y coordinen “reglas” de manera de transmitirle el mismo mensaje a sus hijos.

“Todos los días, la tecnología nos presenta nuevos escenarios a los adultos. Como inmigrantes digitales, necesitamos informarnos para estar cerca de los más chicos. El dialogo abierto es la única manera de acompañarlos en la experiencia en el ciberespacio y evitar esta clase de acciones.”, aconsejó María Belén Rey, coordinadora general de Argentina Cibersegura. 

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