Claudio Bonadio parece ser el karma de la ex presidenta. El juez, que ya procesó a Cristina Fernández en “Los Sauces” y la envió a juicio oral por el “Dólar Futuro”, se quedó con la causa por supuesto encubrimiento de los iraníes acusados de la voladura de la AMIA a partir de la firma del memorándum de entendimiento con ese país, que denunció el fiscal Alberto Nisman cuatro días antes de ser hallado muerto en su departamento con un disparo en la cabeza.

Así lo definió la Cámara Federal, que resolvió el incidente de competencia entre el juez federal Ariel Lijo y su par Bonadio.

“Corresponde que el magistrado que primero conoció en los eventos sea el que prosiga con su investigación”, sostuvo en su fallo.

Lijo fue el receptor de la denuncia original que el fiscal Nisman había presentado contra Cristina y otros funcionarios del gobierno K.

Pero Bonadio había reclamado el expediente con el argumento de que guarda conexión con otro que tramita en su juzgado, en el cual el ex canciller Héctor Timerman está denunciado por el delito de “traición a la Patria”, también en relación con el supuesto encubrimiento de los iraníes.