A cuatro días de oficializadas las candidaturas para competir en las próximas elecciones legislativas, el conflicto docente en la provincia de Buenos Aires se encamina hacia una resolución. 

El Gobierno administró la disputa con los gremios docentes bonaerenses con “timing” electoral. 

No es para menos. El ministro de Educación de la Nación, Esteban Bullrich, es la espada electoral de Cambiemos en el principal bastión electoral del país. 

El funcionario es el candidato a primer senador y tendrá la tarea de ser el adversario principal de la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, quien disputará una banca en la cámara Alta por Unidad Ciudadana. 

No es casualidad que el mismo día que la administración de María Eugenia Vidal mejorase la oferta a los docentes (ofreció un 27,4%), el jefe de gabinete Marcos Peña anunciara que Bullrrich abandonará su cartera para dedicarse de lleno a la campaña. 

El período proselitista comenzará formalmente el 14 de julio, un mes antes de las PASO. Ese día el ministro renunciará a su cargo.

Para su lanzamiento, Bullrich apuesta a tener resuelto el conflicto con los docentes en el territorio que visitará con asiduidad una vez que se agite la bandera de largada del período proselitista.

Otra factor apura la resolución de uno de los conflictos que mayor impacto mediático tuvo a comienzos de año: el sucesor de Bullrich en el ministerio sería, de no mediar ningún inconveniente, el actual director general de Cultura y Educación, Alejandro Finocchiaro (en la Provincia la cartera educativa no tiene rango de ministerio).

Finocchiaro fue el encargado de negociar con los gremios y en más de una ocasión fue la cara visible del conflicto.

Si los planes del oficialismo se cumplen a la perfección, Finocchiaro asumiría el cargo nacional con el frente docente local resuelto.

Esto implicaría un doble alivio ya que el sucesor de Finocchiaro en Provincia recalaría con el horizonte docente bastante despejado. Entre quienes suenan con fuerza para reemplazarlo en la Provincia se anotan Gabriel Sánchez Zinny (ministro de Salud bonaerense) y Manuel Vidal (Subsecretario de Gestión Territorial en Educación de la Provincia).

En este contexto, tanto en el Gobierno nacional como el provincial esperan expectantes la respuesta de los docentes que, según informaron los representantes sindicales, se conocerá el próximo martes. 

La ofertaEl Gobierno bonaerense ofreció este miércoles una mejora salarial que alcanza el 27,4% a los seis gremios docentes de la provincia y ahora los maestros analizarán la propuesta en asambleas para responder el próximo martes. 

Se trata del primer acercamiento concreto en catorce reuniones y 144 días de conflicto que hay entre la administración de Vidal y el Frente de Unidad Docente, integrado por Suteba, FEB, UDA, Sadop, Amet y Udocba.

La propuesta consiste en un incremento salarial del 24% en dos cuotas para el sueldo consolidado más un 3,4% para la recuperación del salario perdido en 2016, cuando la inflación superó a la mejora de los sueldos.

La propuesta también contempla una cláusula gatillo que se disparará en caso de que la inflación supere el 21,5%. 

A partir del reclamo de los gremios, los jubilados del sector recibirán el mismo beneficio. 

Así lo anticiparon los dirigentes gremiales Roberto Baradel (Suteba) y Miguel Ángel Díaz (Udocba) al salir del encuentro con los ministros de Economía, Hernán Lacunza; el director educativo, Alejandro Finocchiaro; y de Trabajo, Marcelo Villegas.

"Queda demostrado que había plata. Sabíamos que la propuesta se podía mejorar, lo que pasa es que el Gobierno eligió hasta el día de hoy la confrontación con los docentes permanente, hoy han modificado ese punto, han modificado la propuesta", dijo Baradel.

Por su parte, Mirta Petroccini, titular de la FEB, señaló que "hubo una mejora", aunque remarcó que la oferta acercada por la Provincia deberá ser sometida a consideración de "las bases".

La propuesta será analizada en asambleas durante jueves y viernes y los delegados realizarán congresos el lunes para informar a los secretarios generales de los seis gremios si las bases aceptan o no la propuesta.

Baradel y Díaz aclararon que más allá de que se acepte o no la propuesta oficial, los maestros seguirán exigiendo a la Provincia que les devuelva los descuentos de sueldo que les aplicó por las jornadas de huelga.

"La propuesta es menos peor que al principio. Nosotros insistimos en que necesitamos un incremento real del 35% para recuperar la erosión salarial que generó la inflación entre 2016 y lo que va de este año", dijo Díaz.

Si llega a haber acuerdo –algo que parecía descontado este miércoles por el ánimo de los sindicalistas al salir de la reunión con los ministros–, los gremios pedirán al Gobierno que la Comisión Técnica Salarial discuta las sumas en informales del salario.