BMW tiene algunos modelos que han trascendido todos los tiempos, y se han convertido en productos con vida propia.

Uno de ellos es el M5, un sedán deportivo que une en un mismo auto el máximo confort con toda la potencia y deportividad.

Ahora, la marca ha decidido mostrar las modificaciones de sus tres décadas de vida a través de un video, en ocasión de presentarse la última generación.

El nuevo modelo tiene un motor 4.4 V8 TwinPower Turbo, con 600 CV y 750 Nm de par motor, cuya mayor novedad es el sistema de tracción xDrive desconectable.

El primer M5 en llegar a la casa de la hélice marcó una tendencia clara en 1985. Querían aunar en un mismo auto el refinamiento de las grandes berlinas alemanas con la deportividad inherente a la marca, para los cual tomaron un Serie 5 y le acoplaron un motor 3.5 de seis cilindros en línea derivado del M1 que no llegaba por poco a los 300 caballos.

Cuatro años después la segunda generación era más potente, con 315 CV pero también mucho más grande que el anterior y por consiguiente más pesado. En el 92, tras su primera aparición en el 20 Jahre Edition se introdujo el último motor seis en línea en un M5 con un 3.8 litros de 340 CV.

En 1998 llegó el BMW M5 E39, con su motor V8 de 4.9 litros y una potencia que subía hasta los 400 CV, un motor que siguió creciendo con el 5.0 V10 del M5 E60 de 2005 y sus 507 caballos.

En 2011 se volvió a los V8, con el 4.4 turboalimentado de ocho cilindros y 560 CV.

La historia se cierra este año, con el nuevo modelo. El M5 de 2018 sigue creciendo con un sistema de doble turbo completamente nuevo que lleva su 4.4 V8 hasta los 600 CV y lo combina con una caja de cambios automática de ocho relaciones para convertirse en el M5 más refinado de toda la historia.