La Bolsa porteña cayó el lunes ante una toma de ganancias que afectó, principalmente, a las acciones de los sectores energéticos y financieros, en un contexto de pocos negocios realizados.

Este retroceso se produce tras marcar máximos históricos la semana pasada, en los que superó los 35.000 puntos por primera vez en la historia.

En resumen, el índice Merval de la Bolsa de Buenos Aires descendió 0,9%, en torno a los 34.800 puntos, aunque en todo enero acumula una ganancia más que interesante.

Así se destacó la merma del 4,8% anotada en las acciones de YPF, seguidas por Supervielle (-3,7%) y Edenor, con un retroceso del 3,4%. 

En sentido inverso, Distribuidora General Cuyana trepó 4%, Mirgor avanzó 3,3% y Central Costanera escaló 3,1 por ciento.

El referencial líder, que marcó el viernes un máximo histórico de intradiario de 35.335 puntos, acumula una mejora del 16,5% en lo que va del 2018.

"Las acciones vuelven a intercalar un respiro tras un nuevo máximo histórico y superar los 35.000 puntos, toda vez los operadores esperan una saludable corrección tras la fuerte escalada, más allá de que el optimismo sobre el ‘upgrade' de (el gestor de índices) MSCI sigue vigente", dijo Gustavo Ber, analista de Estudio Ber.

En Wall Street, en tanto, los papeles de YPF se desplomaron 5,8 por ciento.

En cuanto a los títulos públicos, entre los más negociados se destacaron las bajas de los cupones del PBI en pesos y en dólares, que descendieron 2,3% y 2,1%, respectivamente. También sobresalió el retroceso del Bonar 2046, con el 1,9 por ciento.