Una tragedia reavivó y con mucha fuerza el conflicto docente en la provincia de Buenos Aires.

La vicedirectora de una escuela de Moreno, Sandra Calamaro, y el portero Rubén Rodríguez murieron en la mañana de este jueves como producto de una explosión, originada en un escape de gas en la cocina del establecimiento educativo. La pérdida había sido denunciada. Como consecuencia, los docentes bonaerenses anunciaron un nuevo paro para mañana como protesta.

El secretario general de Suteba, Roberto Baradel, anunció una huelga general en la Provincia para este viernes. "Vamos a exigir la emergencia edilicia y que arreglen la escuelas", expresó el gremialista desde la puerta de la Escuela Nº 49 adonde se acercó luego de la explosión.  Suteba había realizado un cese de actividades este lunes y martes por el que el gobierno de Vidal quiere aplicarle una multa de más de $600 millones porque aseguran que violaron la conciliación obligatoria.

 

Dirigentes de ATE bonaerense, el gremio de los estatales, manifestaron su acompañamiento a través de un quite de colaboración.

Ante la denuncia de los docentes, el subsecretario de Educación de la Provincia de Buenos Aires, Sergio Siciliano, salió a brindar explicaciones públicas. Sostuvo que las instalaciones de la escuela del partido de Moreno habían sido revisadas este miércoles por un gasista matriculado.

De esa forma, buscó deslindar responsabilidades.

En ese sentido, el funcionario concluyó que la tragedia se produjo "por un trabajo mal realizado o por una situación no contemplada" por el profesional que realizó la tarea para una empresa contratada por el Consejo Escolar de Moreno.

El funcionario, en diálogo con el canal de noticias TN, sostuvo que la empresa "debió garantizar" el funcionamiento de los aparatos de la escuela, por lo que concluyó que "hay que investigar qué falló".

Siciliano confirmó que el Consejo Escolar está a cargo de Sebastián Nasif, un interventor nombrado por la Provincia a raíz de "una serie de irregularidades" en el organismo, por el cual fueron desplazados los diez consejeros que habían sido nombrados por el voto popular.

El viceministro admitió que hay problemas de infraestructura escolar, aunque remarcó que "son de muchos años y no se pueden arreglar de un día para el otro".

En cuanto a la decisión de un nuevo paro anunciado para este viernes por parte del gremio docente, en protesta por lo ocurrido, criticó "la utilización política de esta trágica situación".

La explosión y denuncia

La tragedia ocurrió alrededor de las 8 en la Escuela 49, situada en Davaine y Félix Roldán, Moreno, situado a unos 40 kilómetros al oeste de la Capital Federal, informaron fuentes policiales.

En el acto fallecieron la vicedirectora Sandra Calamaro, que estaba a cargo del establecimiento y Rubén Rodríguez, quien se desempeñaba como portero.

La explosión se produjo pocos minutos antes del horario de ingreso de los niños a clase, que iba a ser la segunda después de dos jornadas de paro, que no permitieron reanudar el ciclo lectivo tras el receso invernal.

Los cuerpos fueron arrojados a varios metros en medio del estallido y el de la docente quedó en el medio del patio.

Docentes y padres de alumnos aseguraron que la docente fallecida, que tenía al menos 15 años de antigüedad en el establecimiento, había presentado reclamos -se habla de ocho- en el Consejo Escolar de Moreno por problemas con escapes de gas.

 

En ese sentido, el intendente de Moreno, Walter Festa, responsabilizó directamente al interventor del Consejo Escolar, Sebastián Nasif, a quien sindicó como "responsable" de la situación edilicia en las escuelas.

A media mañana se presentó en el lugar el gremialista Baradel, quien en primer lugar aseguró que Suteba presentará "una denuncia penal, porque estas muertes no pueden quedar impunes".

"Veníamos diciendo que había una situación de abandono, de desidia y hasta de corrupción en las escuelas, pero esto es un desastre", expresó el sindicalista.

Baradel sostuvo que "esto no pasaría" si los hijos de la gobernadora (María Eugenia Vidal), el presidente (Mauricio Macri) y otros funcionarios asistieran a escuelas públicas.

Por su parte, María Laura Torre, secretaria adjunta del gremio, manifestó su "bronca" porque "estas cosas se podrían evitar y la compañera (en alusión a la docente fallecida) había denunciado la pérdida de gas".

"La gobernadora Vidal es la única que tiene que explicar qué hace con las escuelas porque esto no fue un accidente, se podía haber evitado", expresó la dirigente en declaraciones al canal Crónica.