Montadas sobre el objetivo alcanzado por el Gobierno de mantener la inflación de 2006 en un dí­gito, las cámaras empresariales salieron ayer a conjurar la inminente presión de los sindicatos para las negociaciones salariales de este año.

Con sugestiva sincroní­a, la Unión Industrial Argentina (UIA) y la Cámara Argentina de Comercio (CAC) emitieron ayer sendos comunicados para felicitar al Poder Ejecutivo Nacional por la contención del í­ndice de precios. Y al mismo tiempo, advertir que la inflación acumulada del año pasado deberá ser la guí­a para las paritarias de 2007.

El dí­gito de inflación "constituye un punto de referencia indubitable a la hora de resolver las polí­ticas de ingresos de 2007", sostuvo la UIA.

Con la misma musa inspiradora, el texto de la CAC señala que "el nivel inflacionario, recientemente conocido, debe ser la pauta de referencia esencial para las negociaciones salariales que puedan tener lugar en el transcurso del año".

Tal como anticipó Infobae, el comunicado de la entidad fabril fue producto de una reunión que mantuvieron este miércoles cinco de sus vicepresidentes con datos ciertos acerca del número final que anunciarí­a al dí­a siguiente el Gobierno.

Un frente patronal le servirí­a al Gobierno como respaldo a su polí­tica de contención de precios al consumidor, al tiempo que también serí­a funcional para los propios empleadores al poner un lí­mite a las pretensiones de los sindicatos, para no afectar la demanda interna y tampoco perder competitividad con el resto del mundo.

Primer round

Es que si bien las paritarias no arrancaron formalmente, desde diversos gremios se anticiparon pedidos de aumento salarial de entre 15 y 25%, cuando la pauta oficial es más cercana a 13 por ciento. Un caso ilustrativo es el de la Unión Obrera Metalúrgica (UOM), cuyo lí­der, Antonio Caló, adelantó que su planteo será cercano al 20 por ciento.

"En este momento, el aumento que podemos dar es cero", graficó a este diario el presidente de la Asociación de Industriales Metalúrgicos (Adimra), Mario Polijronópulos.

El directivo sostuvo que el sector ya dio aumentos que superaron 82% la inflación acumulada desde el 2001, y 15% el valor del dólar durante el uno a uno.

El industrial advirtió: "Si concedemos un aumento, corremos un serio riesgo de aumentar el desempleo, provocar el cierre de empresas y promover la importación de productos que desde hace un tiempo pudimos volver a producir nosotros".

Rodolfo Achille, presidente de la cámara de fabricantes de autopartes (AFAC), coincidió con el comunicado de la UIA y sostuvo que los aumentos salariales de este año, más que basados en la inflación prevista, deberán guiarse por criterios de ganancias de productividad del conjunto de los factores de la producción, de modo de asegurar el proceso de crecimiento sustentable que requiere la economí­a argentina.

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