Buscan poder remover al directorio del BCRA a través del Congreso: así es la propuesta
Con el objetivo de que el Poder Legislativo ejerza efectivamente una de las facultades que le fue delegada por la Constitución Nacional, sobre "establecer y reglamentar un banco federal", el diputado del Pro Oscar Agost Carreño presentó un proyecto de ley que propone que el Congreso sea el encargado de la remoción de los directores del Banco Central y no el Poder Ejecutivo.
En diálogo con iProfesional, el cordobés argumentó que "el constituyente estableció en la Constitución que un resorte del Poder Legislativo es todo lo que tenga que ver con que haya un banco federal y mantener el valor de la moneda. Pero la ley (de la Carta Orgánica del BCRA) dice que la designación es del presidente, con acuerdo del Senado, y que la remoción es un problema del Poder Ejecutivo".
Para el legislador de Juntos por el Cambio, esto se trata de "una delegación incorrecta" porque "si la entrada y la salida de los funcionarios depende solamente del Poder Ejecutivo, la maquinita de imprimir la maneja el Ejecutivo". En ese sentido, consideró que lo que más jerarquizaría y le daría "independencia" al BCRA es que "sea el Congreso, con sus mayorías y minorías, y los controles cruzados que tienen los sistemas parlamentarios, el que tenga a cargo la destitución".
"Está bien que la entrada la proponga el Poder Ejecutivo, pero la salida también tiene que tener un procedimiento que se dé en el seno del Congreso de la Nación. Hay que corregirlo modificando la Carta Orgánica del Banco Central", insistió.
Directorio del Banco Central: la oposición busca restarle poder al Presidente
Agost Carreño, recientemente ingresado a la cámara baja en reemplazo de Gustavo Santos, afirmó además que "el valor de la moneda tiene que ser controlado por el Poder Legislativo" y explicó: "Si hoy como diputado quiero remover, o interpelar, a algún miembro del directorio tengo que hacer una moción de censura a través de un proyecto de resolución, pidiéndole por favor al Ejecutivo que haga algo y me parece que eso está mal". "El Congreso no puede estar pávido, mientras el valor de la moneda es irrisorio", enfatizó.
El diputado del Pro remarcó que "en la mayoría de los países civilizados el Parlamento se hace cargo" de esta cuestión, ya que "no puede ser que el Gobierno mande a imprimir y el BCRA imprime". "Por ejemplo, en Perú, el Banco Central tiene absoluta independencia y mientras hubo un lío terrible en la política y destituían al presidente, el valor de la moneda estaba siendo cuidado por técnicos especialistas", ejemplificó.
"No se puede pensar en mejorar el Banco Central si no es lo suficientemente independiente", dijo Agost Carreño a iProfesional y sumó, respecto a la idea de dolarización que proponen desde La Libertad Avanza, que "pensar en dolarizar es depender del Banco Central de Estados Unidos; no sé si es la solución económica y lo que quiere nuestra Constitución".
Sobre la gestión de Miguel Pesce, el diputado opositor la calificó como "pésima porque el valor del dinero todos los días se desprecia mucho más". "Si no puede mantener de una semana a la otra, o de un mes al otro, el valor de la moneda, claramente no sirve. Estamos al borde de una hiperinflación, sin dudas por muchas culpas del kirchnerismo y la macroeconomía, pero él a cargo del BCRA no creo que haya sido efectivo. No tendría que haber imprimido más de lo debido y eso ha hecho", señaló.
El proyecto plantea modificar un artículo de la Carta Orgánica
La iniciativa presentada por el diputado fue acompañada por sus pares Luciano Laspina -del equipo económico de la candidata Patricia Bullrich-, Lidia Ascárate, Adriana Ruarte, Mario Barletta, Manuel Aguirre, Mónica Frade, Gerardo Cipolini y Carlos Zapata.
Puntualmente, el texto plantea modificar el artículo 9 de la Carta Orgánica del BCRA para establecer que "los integrantes del directorio podrán ser removidos de sus cargos por el Honorable Congreso de la Nación, por incumplimiento de las disposiciones contenidas en la presente Carta Orgánica, por incurrir en alguna de las inhabilidades previstas en el artículo anterior, cuando mediare mala conducta o incumplimiento de los deberes de funcionario público".
A su vez, indica que el proceso de remoción constará de una "etapa de iniciativa" que "debe darse con la aprobación de un pedido de interpelación a los efectos del tratamiento de una moción de censura. Esta etapa puede ser promovida en cualquiera de las dos cámaras y requiere una mayoría absoluta de los miembros".
En segundo lugar, se instrumentaría la "etapa de ejecución", a partir de "la moción de censura, que también requiere el voto de la mayoría absoluta sobre la totalidad de cada una de las cámaras y cuyo efecto es la remoción del funcionario".
En la normativa vigente está determinado que "la remoción de los miembros del directorio será decretada por el Poder Ejecutivo nacional", aunque con la aclaración de que para ello se deberá contar con "el previo consejo de una comisión del Honorable Congreso de la Nación".
En los argumentos, Agost Carreño advirtió que "las intromisiones del Poder Ejecutivo resultan desmedidas, cuando el valor de la moneda se está volviendo irrisorio, pero sobre todo cuando ello genera, a diario, más pobreza en el pueblo".