Los conflictos entre padres separados por la cuota alimentaria de los hijos es un problema frecuente que le trae complicaciones al que tiene la tenencia, que generalmente es la madre. Pero existen maneras por vía judicial para cobrar si uno de los progenitores lleva meses sin pagar.

Es importante saber como proceder ante estos casos, que pueden suceder por una cuestión de lo que se denomina violencia económica, o bien porque quien tiene que abonar no está en condiciones de hacerlo, por falta de trabajo u otras razones. 

En esta nota, te contamos qué pasa si el progenitor o la progenitora no cumple con la cuota alimentaria, qué se puede hacer al respecto y cómo se realizan los reclamos. Para saber todos los detalles, seguí leyendo. 

Qué pasa si el progenitor o la progenitora no cumple con la cuota alimentaria

En primer lugar, para obtener la cuota alimentaria se puede intentar llegar a un acuerdo mediante una mediación comunitaria, con la intervención de un Centro de Acceso a la Justicia (CAJ), al que la parte damnificada puede dirigirse.

También, con asistencia de una abogada o abogado, se le puede pedir un juez o jueza que fije la cuota alimentaria, que se debe abonar en forma mensual, anticipada y sucesiva. 

El progenitor o progenitora que no cumple con la cuota alimentaria está vulnerando un derecho de su hijo o hija.

Si la cuota alimentaria fue fijada por el Poder Judicial es una obligación y debe cumplirse. En caso de que la otra madre o el otro padre no cumpla con su obligación de alimentos, se pueden pedir medidas sobre sus bienes, ingresos o sueldo.

Si el progenitor o la progenitora no cumple con la cuota alimentaria, ya sea acordada por las partes (y homologada por un juez) o fijada directamente por el Tribunal, hay varias formas para lograr que el deudor cumpla con lo que le corresponde.

La ley sobre la cuota alimentaria deja librado al arbitrio judicial las medidas para asegurar el cumplimiento de la obligación alimentaria. El juez puede imponer medidas razonables para garantizar la eficacia de la sentencia, como:

• Sanciones valuadas en dinero contra el deudor que demora el cumplimiento de una orden judicial, y que son requeridas por el juez a razón de una suma de dinero por cada día, cada semana o cada mes en que un deudor retarda el cumplimiento de una obligación determinada mediante una resolución judicial. Estas sanciones pueden ser pecuniarias (de dinero) o ejecutables (embargo de los bienes);
• La inscripción del alimentante en los registros de deudores alimentarios morosos (leyes 269 de la CABA y sus correlativas provinciales): el damnificado deberá demostrar que el padre o madre no ha pagado las cuotas correspondientes y tramitarlo a través de un juez que solicite la inscripción del deudor en el registro. Si el deudor es incripto en dicho registro se le pueden aplicar sanciones legales como la retención de ingresos, la inhabilitación para conducir, entre otras medidas coercitivas;
• La prohibición de salida del país por tiempo limitado.

Además, el juez puede, a petición de parte:

• Impedir el acceso del deudor de cuota alimentaria a eventos musicales y deportivos;
• La caducidad de sus tarjetas de crédito y débito a través de notificación al Banco Central;
• Imponer la inscripción en el Veraz de la deuda alimentaria;
• Decretar la imposibilidad de renovación del pasaporte y el documento nacional de identidad del deudor.

Existe también la posibilidad de realizar una denuncia penal por el delito de incumplimiento de los deberes de asistencia familiar. Tal delito acarrea una pena de prisión de un mes a dos años o multa.

Otra opción es demandar a los parientes directos del alimentante incumplidor.

Cómo se establece la cuota alimentaria

No existe un monto o porcentaje fijo de cuota alimentaria, siempre depende del caso concreto. La cuota alimentaria depende no solo de los gastos que tenga el niño/niña/adolescente sino también de la capacidad económica del progenitor/a alimentante.

Es importante destacar que, con el contexto inflacionario la cuota alimentaria no se pacta en un monto fijo, pues de ser así perdería valor mes a mes. Por tal motivo, se busca fijar un porcentaje del ingreso.

Generalmente, si el progenitor/a que debe abonar cuota alimentaria tiene trabajo registrado, y por lo tanto, un ingreso fijo, se establece un porcentaje de dichos ingresos.

Qué pasa si el progenitor o progenitora que no paga la cuota alimentaria no tiene trabajo 

Tanto el progenitor como la progenitora tienen la obligación alimentaria

Ninguno de los progenitores está eximido de abonar cuota alimentaria en beneficio de su hijo bajo ninguna circunstancia. En el caso de que el progenitor/a no tenga empleo o esté trabajando en negro, se fija un porcentaje del Salario Mínimo Vital y Móvil.

Cómo se paga la cuota alimentaria

Pueden establecerse distintas formas de pago, tales como depositar el dinero en una cuenta bancaria destinada al pago de la cuota alimentaria.

En este caso, el Juzgado mediante oficio al Banco, ordena la apertura de una cuenta bancaria a los fines de que el progenitor/a que debe la misma, la deposite allí. La importancia de la apertura de esta cuenta bancaria es que, al tener ese único fin, es inembargable.

Si el progenitor no puede abonar el dinero, una opción es pagar la cuota alimentaria en especie, es decir abonar la cuota escolar, la obra social, la asistencia a determinado club para una actividad deportiva, entre otros. Pero deberá completar lo que falte de la cuota con dinero. 

En conclusión, cabe remarcar que el progenitor o progenitora que no cumple con la cuota alimentaria está vulnerando un derecho de su hijo o hija, y se enfrenta a complicaciones y sanciones de menor a mayor gravedad, según el caso. Es importante que la parte damnificada por el incumplimiento del pago conozca las opciones que tiene para solicitar lo que le corresponde para la crianza y manutención del niño o niña que tiene en común con la otra persona.