El economista Juan Carlos de Pablo evaluó este martes la situación de Grecia, país que debe definir si salda su deuda con la Unión Europea, mientras los bancos siguen cerrados por falta de liquidez.

En diálogo con Radio Mitre, el analista subrayó: "Acá hay un tema de perspectiva. La gran cuestión que no tiene respuesta es en qué gobierno y en qué equipo económico van a confiar los griegos."

De acuerdo al economista, los griegos votaron masivamente por el "no" al pago de la deuda, pero si se abrieran los bancos "salen todos rajando" a retirar su dinero. Por eso, más allá de su referéndum, en la negociación con el Eurogrupo este país se encuentra debilitado.

"Hoy Grecia no puede asustar a nadie", remarcó el economista, a diferencia de lo que ocurría en 2009, cuando se pensaba que una caída del sistema bancario griego podía golpear a otros países del bloque.

Por otra parte, remarcó que "la historia dice que es muy difícil para un gobierno mantenerse cuando pone un corralito, porque genera increíble cantidad de tragedias individuales que salen en todos lados". 

Por eso, para De pablo el problema no es el pago de la deuda, sino "cómo los griegos resuelven tener un gobierno en el cual confían. Sería la versión griega de 'vivir con lo nuestro'"

"Necesitan un ministro de Economía que, para ser creíble, va a tener que ser mucho más duro de lo que imaginaban", respondió. "Para remontar un problema de credibilidad, va a tener que ser mucho más ortodoxo que los demás, para ver si le creen un poquito", completó. 

"La mala lectura de lo que ha pasado en Grecia en los últimos 5 años resultó en la falta de credibilidad", insistió el economista, porque la austeridad a ultranza "cuando no es creíble, también es un sacrificio al cuete"

Economías Regionales

Por otra parte, De Pablo analizó la situación de las economías regionales en la Argentina, que se encuentran en crisis por los altos costos de producción que suben por la inflación, la presión fiscal y el tipo de cambio atrasado.

A estas complicaciones se sumó además el paro de 10 días anunciado por los trabajadores del SENASA, en el momento en que los productores frutihortícolas del sur del país buscaban recomponer sus márgenes, tras la reapertura de las exportaciones a Brasil, que estuvieron suspendidas este año.  

En Rio Negro, por caso, denuncian que por esta situación se están pudriendo 200 millones de kilos de manzanas, y De Pablo consideró que lo que ese productor obtenga por la venta de las mismas, no le alcanzará para pagar por el trabajo de plantar, recogerlas, empaquetarlas y trasladarlas.

"Ciertamente cuando tenés un tipo de cambio como este, retenciones y costos de transporte, lo que te queda es algo que no compensa", dijo el economista por Radio Mitre, y aclaró que "el problema de las economías regionales es que elsector privado no puede competir con los salarios públicos de esas provincias."

"A través del sistema de coparticipación en muchos lugares se financian niveles de salario público que han inviable la actividad privada", continuó en su análisis De Pablo.